Fueron cinco goles pero pudieron ser casi una docena. Ginés Meca se infló a meter goles en la tarde de ayer y cinco de los ocho que la Peña Deportiva le hizo al Collerense llevaron su firma. El ariete estrenó su cuenta muy pronto y, en el minuto 1, ya había batido la portería defendida por Jesús. Poco antes de la media hora de partido, en el minuto 28, hizo el segundo tras aprovechar un rechace del meta visitante a disparo de Edu López. Los otros tres goles llegaron en la segunda parte. En el minuto 59 Meca anotó su tercer gol, el más bonito de todos. El delantero vio adelantado a Jesús y anotó de preciosa vaselina. Pero ahí no había acabado el festín goleador del '9' de la Peña. En los minuto 79 y 88 cerró su cuenta con dos nuevos tantos. Además, por si eso fuera poco, estrelló un balón en el travesaño en el minuto 79 y pudo marcar en varias ocasiones más.
Meca fue el principal protagonista del partido ante el colista, pero no el único. Espadas, ex delantero del Collerense, también quiso unirse al festival realizador y sumó sus dos primeros goles en el campeonato de liga. Además, demostró que puede formar una pareja letal en ataque junto a Meca, con Edu López como tercera estrella del tridente ofensivo del equipo de Santa Eulària. El resto del equipo también brilló a un gran nivel, si bien enfrente no había un rival digno de consideración. El Collerense no dio señales de vida en todo el partido, mostrándose inexistente en ataque y muy débil en defensa.
El partido no tuvo color y eso se reflejó en el marcador desde el primer minuto. El primer gol de Meca, cuando apenas se habían jugado 60 segundos de partido, fue una losa insuperable para el equipo que dirige Miquel Crespí, entrenador que el año pasado aseguraba que nunca entrenaría a la Peña Deportiva y que ahora suspiraría con tener un equipo de tanta calidad. El encuentro ya estaba definitivamente roto a la media hora de juego, con 3-0 en el marcador. Y la segunda parte fue un auténtico calvario para los visitantes, que encajaban goles de todas las facturas. De todas formas, el 8-0 parece un mal menor para el Collerense, teniendo en cuenta que los ibicencos estrellaron el balón en la madera hasta en tres ocasiones y que Meca se encontraba en racha y prácticamente convertía en gol todo lo que tocaba. Ahora, a la Peña le espera la visita al campo del Poblense y afronta el duelo con mucho optimismo. No en balde, son los rivales los que deben tener miedo a un equipo que ya suma tres victorias seguidas y sale a 3 goles por partido.