Felipe Hernández Boned se muestra más que ilusionado. Este domingo cambiará la arena del Hipódromo de Sant Jordi, donde compite cada domingo, por el asfalto de Valencia en el que es sin duda un duelo muy especial. Ni más ni menos que contra el campeón del mundo de ciclismo en ruta, Óscar Freire. El ciclista cántabro se medirá al caballo Duc du Rieutort que conduce el ibicenco sobre una distancia de 1.000 metros. Este original reto tendrá lugar en el Paseo de la Alameda de Valencia, dentro del Critérium Internacional Comunidad Valenciana. «Me parece una iniciativa muy interesante y seguro que se verá una carrera muy bonita. Además, creo que será bueno para el trote, porque puede servir para potenciar este deporte», asegura el jinete, que no tiene muchas dudas sobre el resultado de la prueba. «Espero que sea una carrera muy reñida aunque, en principio, Freire lo tiene todo a su favor. El caballo seguro que va por delante en la salida y, después, dependerá de cómo se adapta al hecho de correr en asfalto aunque, en lógica, Freire debe ir más rápido al final», comenta Hernández, que ayer ultimaba los entrenamientos en el Hipódromo antes de viajar hoy hacia Valencia.
La principal dificultad de la prueba es el hecho de tener que correr sobre asfalto. «Eso beneficia al ciclista y, por el contrario, nos perjudica mucho a nosotros. He tenido que cambiar las herraduras habituales por unas de plático para que pueda tener un mejor agarre, porque si no se resbala. De cómo se adapte a esa superficie dependerá el papel que podamos realizar el domingo», añade.
Pase lo que pase en la carrera, lo que sí es seguro es que Felipe Hernández está orgulloso de su montura, de 13 años de edad y origen francés. «Sale de una lesión pero, desde hace dos meses ha competido en tres pruebas, haciendo además muy buen papel», asegura Hernández, que reconoce que esta oportunidad le llegó casi de casualidad: «Un amigo mío conocía al organizador del Critérium, Javier Castellar, y cuando surgió esa posibilidad, salió mi nombre».