Iván Muñoz
Corría el minuto 74 y el Villarreal vencía por 2-1 al Zaragoza después de remontar el tanto marcado por Aimar en el minuto 22. El conjunto maño apretaba, así que Pellegrini decidió hacer el segundo cambio del partido. Miró a la banda, donde calentaban varios jugadores, y llamó a uno de ellos. Seguro que con la intensidad del choque no se dio cuenta de que ese sería un momento inolvidable en la vida de Marcos García. El jugador ibicenco, que desde hace varias temporadas milita en las categorías inferiores del conjunto amarillo, pisaba por primera el terreno de juego del Madrigal durante un encuentro de Primera División. Antes ya había jugado con la primera plantilla tres partidos en Copa de la UEFA. Incluso había ido convocado al Bernabéu en el primer compromiso liguero de la temporada, en el que empataron 0-0. Pero no fue hasta el pasado domingo cuando pudo hacer realidad un sueño que espera que se repita muchas veces de ahora en adelante.
«La experiencia ha sido muy buena y estoy muy contento. Jugué un cuarto de hora y me encontré seguro y con confianza. No me lo esperaba porque el mister no me había dicho nada, así que fue una sorpresa que decidiera sacarme con el 2-1», explica Marcos.