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Baloncesto Liga EBA

El despertar del gigante se produce tras el primer cuarto

Eivissa Básquet 78 Aguas de Valencia 58EIVISSA BÀSQUET SA GRADUADA (17+19+19+23): David Díaz (-), Àngel Pascual (3), Javier Vázquez (18), Jorge Rosa (4) y Jordi García (7) "cinco inicial", Marc Roig (-), Eduardo Aguado (-), Kelly Urit (19), Juan José Miranda (-), Bartolo Marí (-), David López (15) y Martin Marek (12).

AGUAS DE VALENCIA SAGUNTO (29+13+4+12): Alcocer (2), Más (6), Ruiz (2), Antoni (17) y Francés (10) "cinco inicial", San Miguel (7), Carrión (2), Salvador (8) y Borges (4).

Àrbitros: Madrid Sabater y Soto Medina.
Incidencias: Partido disputado en el pabellón Es Pratet ante la presencia de 100 espectadores.
Redacción
El Eivissa Básquet Sa Graduada tuvo que trabajar más de lo esperado para superar al penúltimo clasificado, el Aguas de Valencia Sagunto. El equipo de José Luis Oliete saltó dormido a la cancha, tanto que encajó un parcial 17-29 que llevó la incertidumbre a la grada.

Entonces, el gigante despertó y sacó toda su clase a relucir, con Kelly Urit soberbio "anotó 19 puntos, capturó diez rebotes, puso cinco tapones y sumó 30 de valoración", y David López y Javier Vázquez acertados en el lanzamiento.

Los ibicencos empezaron a remontar en el segundo cuarto, que se saldó con un 19-13 que les permitió colocarse a seis puntos de su rival al descanso.
Tras el asueto, el cuadro local se convirtió en una auténtica apisonadora que nada ni nadie pudo frenar. El parcial 19-4 habla por sí solo del vendaval que se le vino encima al cuadro valenciano. El daño pudo incluso ser mayor si en la última acción de este tercer periodo se hubiera dado validez a un triple de Jorge Rosas desde el centro del campo que los árbitros anularon por haber sonado la bocina antes.

La fiesta continuó en el último acto. El 55-46 con el que arrancaron los diez últimos minutos no daba pie a la relajación, por lo que el Eivissa Básquet Sa Graduada no quitó el pie del acelerador y fue incrementando su renta paulatinamente. El Aguas de Valencia bajó los brazos ante un equipo ibicenco al que le salía todo: tiros, rebotes, defensa... Así las cosas, el encuentro se cerró con un contundente y rotundo 78-58, que mantiene a los chicos de Oliete en la zona media-alta de la tabla.

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