«Es el debut soñado». Luis Elcacho, entrenador de la Peña Deportiva, no pudo ser más claro tras la victoria sobre el Barça B (1-0). El técnico de los deportivistas, que tuvo que dirigir a los suyos desde detrás del banquillo al no haber llegado aún su ficha, destacó que «lo más importante son los tres puntos y lo que significa la victoria para el club y, sobre todo, su junta directiva, que se ha dejado el alma y algo más en que todo empiece a funcionar». «Y si encima de los tres puntos estamos ya por encima del Eivissa, mejor», agregó.
El ilerdense confesó que su equipo fue de menos a más tras sacudirse «el respeto» por la camiseta azulgrana. «Creo que hubo varios jugadores que le han tenido mucho respeto al debut, a la categoría, al rival y se le ha dado mucha importancia a que era el Barça. Al fin y al cabo, en el campo juegan once contra once», explicó Elcacho, quien considera clave el hecho de «haber estado mejor físicamente que ellos». En ello jugaron un papel muy importante los cambios efectuados en el transcurso de la segunda mitad: «Borja, Heredia con su velocidad y Tino han sido básicos para poder romper el partido. Quizá cuando más igualado estaba todo es cuando estos jugadores han aportado la frescura necesaria par ganar el partido».
El preparador de los santaeulalienses tiene ahora una nueva tarea por delante: contener la euforia. Por eso, no se mordió la lengua a la hora de asegurar que «al que saque pecho se lo corto rápidamente», pues «esto no ha hecho más que empezar». «Antes del partido les dije que firmaría perder y ganar el resto de encuentros», apuntó el míster, sabedor de que esta victoria sirve «para coger confianza».
Por último, alabó al rival: «El Barça B, cuando empiece a coger un poco el hilo a la categoría, va a ser temible. Maric fija bien lo centrales, sus bandas tienen velocidad y calidad... Es un equipo completo, pero tiene que ponerse el mono de trabajo».
Lucho, descontento
Luis Enrique, entrenador del Barça B, no ocultó su decepción: «La ambición, predisposición y actitud es algo que debe ir implícita en todo jugador de fútbol y tengo que incularlo a mis jugadores, que están muy bien dotados, pero de nada sirve si no lo vemos en el terreno de juego».
Sobre el partido, el técnico azulgrana comentó que «empezamos la primera parte con más posesión de balón y jugando bien, pero con cero en mordiente, cero en actitud y cero en ambición. Aun siendo superiores, no hicimos nada para merecer que nos adelantáramos en el marcador excepto en un gol anulado a Goran Maric que me han dicho que estaba en posición correcta. A partir de aquí, la segunda parte ha sido muy diferente, con la Peña esperando nuestro juego. Ha tenido tres o cuatro ocasiones claras y en una materializó un gol. No tengo nada que objetar».