Esta semana uno de los grandes protagonistas en la Peña Deportiva de Santa Eulària es el media punta valenciano Constantino Adrián, Tino. Con siete goles en su cuenta realizadora, el futbolista levantino es el pichichi de un equipo que actualmente ocupa puestos de descenso a Tercera división, aunque con un partido menos que sus rivales. Este domingo, el plantel de Santa Eulària emprende un nuevo desplazamiento, esta vez a la ciudad condal para medirse a un Barcelona Atlétic venido a más.
Tino, probablemente, será la única referencia en la punta de ataque del once que alinee Luis Elcacho ante el filial azulgrana. Pero la historia del valenciano como goleador de la Peña Deportiva tiene miga. Muchos decían sobre el futbolista de 27 años que carecía de galones para la Segunda división B, pero a base de goles ha convencido a todos los escépticos de su valía, incluso a su propio técnico, para quien Tino no empezó siendo un titular indiscutible.
La temporada pasada fue uno de los héroes del ascenso y acabó como máximo realizador de su equipo, empresa que lleva visos de repetirse este curso. «El míster siempre ha confiado en mí. No empecé siendo titular, pero yo sentía que él contaba conmigo», dice el de Sollana. Y así ha sido. Tino es el décimo jugador de la plantilla que más minutos ha disputado (1.101); tan sólo se ha perdido un encuentro en liga y ha sido titular en 12 de los 17 encuentros que ha jugado. Sus números le colocan como el jugador que está tirando del carro de su equipo a base de goles. Pese a no ser el delantero centro del equipo, el media punta lleva un tanto más que Adrián Ramos y supera en cuatro al punta titular, David Gallo.
«Más que como goleador, lo que intento es apoyar al equipo para sacar siempre los tres puntos. Intento aportar lo máximo, trabajo y sé cual es mi forma de jugar, y marcar goles es importante», asegura.
Ante el Barça Atlétic, del que opina que es un rival «muy difícil de batir en su campo», donde «siempre trata de tener la posesión del balón», Tino espera lograr la primera victoria de su equipo como visitante: «Ya demostramos en casa que podíamos ganar (1-0) y nos daría mucha moral poder conseguir el primer triunfo fuera de casa». Un resultado favorable para los ibicencos les haría abandonar los puestos de descenso, teniendo además un partido pendiente contra el Osasuna B, otro rival directo por eludir el descenso.
En cuanto a sus deseos para 2009, el valenciano destaca la permanencia en Segunda B del club de Santa Eulària y en el terreno personal, alcanzar la quincena de goles a final de temporada. Eso sí, sin olvidar los grandes éxitos obtenidos el pasado año y que encumbraron a la entidad de la Villa del Río a la categoría de bronce del fútbol nacional.
«El 2008 fue un año increíble con el ascenso a Segunda B, por el hecho de poder jugar en esta categoría y por estar metiendo goles. No podemos pedir más. Que sigan los goles y que pueda seguir jugando. Pero el deseo fundamental es la salvación del equipo. Si trabajamos con humildad y orgullo, lo conseguiremos», añade Tino.