C. Vidal/X. Cruz
El San Rafael, una vez digerido su éxito en la liga Preferente tras vencer el pasado sábado al Portmany (0-2), ya piensa en las eliminatorias de ascenso a Tercera División, cuyo sorteo se llevará a cabo el próximo lunes. Lo cierto es que el conjunto que entrena Mario Ormaechea ya conoce la hoja de ruta para ascender a Tercera, con un mapa plagado de dificultades, porque al otro lado esperan rivales de la entidad de Sóller, Margaritense o Collerense, con un amplio pasado en el fútbol nacional.
Si algo tiene claro el San Rafael es que esta temporada es la suya. Ha sido el campeón en la liga interpueblos y la liguilla de Regional Preferente y su objetivo ahora es el ascenso, al que este año no tienen intención de renunciar: «En el club hay mucha ilusión de poder regresar a Tercera, algo que también comparten los jugadores. De todas formas, todos sabemos que las liguillas de ascenso son muy complicadas, aunque el equipo intentará hacer un papel más que digno», explica Ormaechea.
La fase de ascenso deja a San Rafael (campeón de Eivissa) y Ferreries (campeón de Menorca) como cabezas de serie, junto a los seis mejores equipos de Mallorca -el Esporles, campeón, ascendió de forma directa-. San Rafael o Ferreries se enfrentarán al sexto clasificado o séptimo clasificado de Mallorca, en función del sorteo, en la primera eliminatoria. Si el equipo ibicenco queda encuadrado en el primer grupo se enfrentaría ahora mismo -falta una jornada- al Sóller, mientras que en caso de vencer esta eliminatoria se enfrentaría al ganador del Llosetense-Margaritense. Si el bombo lo enviara al segundo grupo, se enfrentaría a s'Horta o Penya Arrabal, mientras que en la siguiente ronda jugaría contra el vencedor del partido entre Independiente y Collerense. «De todos esos equipos el único al que no me quiero enfrentar es la Sóller. Me he enfrentado varias veces a ellos en su campo y sé que tienen el público muy encima y que es un rival muy peligroso», explica el técnico.
Fáctor campo
La ventaja de ser cabeza de serie de su grupo es tener en la primera eliminatoria el partido de vuelta en casa. «Es muy importante, sobre todo porque la afición siempre ha respondido con creces, más teniendo en cuenta que en estas fechas ya no habrá más partidos de fútbol en la isla y eso puede hacer que venga más gente al campo». Lo que sí descarta Ormaechea es hacer cambios en la plantilla: «Podríamos hacer refuerzos, porque contamos con varios lesionados. Pero por respeto a mis jugadores, que son los verdaderos protagonistas de estar aquí, voy a seguir confiando en los mismos».