Pedro Ortega, presidente de la SE Eivissa, afirma que Antonio Stina ya no tiene nada que ver con el club tras haber incumplido su parte del contrato y provocar el descenso administrativo del equipo a Regional. Stina, sin embargo, no se da por vencido e insiste en invertir en el Eivissa. «El día 20 de agosto presentaré las garantías de pago de la deuda y el equipo llegará a la isla desde Italia. No quiero hacer la guerra con nadie. Mis intenciones son buenas», afirmó ayer el italiano.
Stina mantiene la propuesta que realizó a Andoni Valencia en Roma el pasado 7 de agosto y que contempla, entre sus principales puntos, disputar con el Eivissa la liga Regional, traerse a varios jugadores desde Italia, mantener el fútbol base y contar con un presupuesto de más o menos 450.000 euros. Además, asume el pago de la deuda que el club mantiene con la Federación Española y con los jugadores de la pasada temporada. Es decir, que se compromete a pagar esta temporada el millón de euros que prometió invertir en su día para hacerse con el 80 por ciento de la propiedad del club ibicenco.
«Por ahora son sólo palabras y todavía no se ha puesto en contacto con el club de una manera digamos oficial. Cuando venga a Eivissa con el dinero en la mesa y con los jugadores que dice, nos pondremos a negociar», señala uno de los directivos del club rojillo. Y es que, a pesar de la mala relación existente en estos momentos entre Pedro Ortega y Antonio Stina, al Eivissa no le quedan demasiadas salidas si no quiere verse abocado a la desaparición. «Estamos contra la espada y la pared», añade dicho directivo, que señala que, pese a la desconfianza que existe actualmente hacia el grupo inversor italiano, «lo que importa ahora es la salvación del club».
Federación
Por otra parte, Miquel Bestard, presidente de la Federación Balear de Fútbol, aseguró que el tema de la deuda con la RFEF de 96.000 euros, tiene solución. «El lunes no pude viajar a Madrid por problemas con el vuelo, pero esta mañana pude hablar con él y el lunes espero volver a reunirme. Es cuestión de negociar el pago a plazos o algo parecido, pero no creo que exista problema alguno, aunque está claro que el club, si no paga, no podrá hacer fichas», reconoció Bestard, que ayer estaba en Eivissa en la reunión de clubes de fútbol sala. Por otra parte, el presidente de la Balear espera también conseguir una medida de gracia para que Mario Ormaechea entrene este año al San Rafael en Tercera. «En principio debería tener el nivel 3, pero queremos conseguir que los equipos ascendidos puedan quedarse con el mismo entrenador», señala.