El partidazo de Tercera División ya está aquí. No ha tenido que pasar mucho tiempo para que la Peña Deportiva Santa Eulària y el Atlètic Balears, los dos principales aspirantes al título sobre el papel, se vean las caras. Hoy, en la quinta jornada del grupo XI, los dos conjuntos que la temporada pasada militaron en la categoría de bronce del fútbol español medirán sus fuerzas.
En principio, los peñistas llegan al partido en mejor forma. Al menos, eso es lo que dice la clasificación, donde el cuadro mallorquín anda perdido por la zona media. Mientras que los de Santa Eulària son segundos , con nueve puntos, el Balears es undécimo, con seis. El arranque de los pupilos de Pere Mariano ha gustado tan poco a la directiva que ésta fulminó al técnico esta misma semana para dar el mando a Pedraza.
Dicen que a entrenador nuevo, victoria segura, pero los discípulos de Luis Rueda, entrenador de la Peña Deportiva, tratarán de poner el dicho en entredicho -valga la redundancia-. Los santaeulalienses vienen de ganar por 0-3 al Campos y mejorar así notablemente su imagen, que no estaba siendo todo lo buena que se esperaba en este comienzo de Liga, quizá por la exigencia existente en torno a un recién descendido de Segunda B. Por su parte, el Balears cedió su segunda derrota del curso contra el Campos, que no conocía el triunfo, el pasado fin de semana, lo que hizo saltar las alarmas y liquidar a Pere Mariano.
El preparador local podrá contar con todos sus hombres a excepción de Eneko, lesionado, y Gavilán, quien «no tiene el tono físico adecuado aún» a pesar de entrenarse ya con el grupo. «Los demás están todos bien», según el míster, quien, eso sí, indicó que «hay algunos jugadores con molestias, pero, salvo que empeoren, estarán disponibles». Entre los tocados se encuentran Vicent, autor de cuatro goles esta campaña, y Villodre, que «se ha entrenado esta semana con el grupo, per no al cien por cien». Por su parte, el Atlètic Balears no podrá contar, entre otros, con los nigerianos Ibok, Laval y Stanley, quienes se encuentran disputando el Mundial sub 20 en Egipto y se medirán mañana al combinado español.
El despido, «una barbaridad»
Sobre el adversario de turno, Rueda comentó lo siguiente: «Es un buen equipo y una buena entidad. No sé si se esperaba más de él o no. Cuadno se tiene que esperar más es a últimos de mayo. Lo que sí creo es que los acontecimientos se han precipitado muchísimo allí. Es una barbaridad que alguien p ueda destituir a un entrenador en menos de un mes, pero no es mi casa y no voy a opinar de ella».
Con respecto a si teme especialmente a algún jugador, indicó: «A mí me imponen respeto todos los rivales y todos los jugadores de la competición. Todo el mundo tiene que respetarse. Nosotros hemos trabajado el partido con la misma intensidad que los del Campos, Alcúdia o Esporles, sin variar un ápice. Pensamos en nostoros y no cambiaremos la forma de trabajar por culpa del rival. Nuesta idea es dar lo máximo, porque así los rivales tendrán problemas, pero me preocupa todo, como todas las plantillas, aunque tengo mucha confianza, como siempre, en los míos».