José Manuel Díaz, presidente de la junta gestora del Club Deportivo Puig d'en Valls, prepara la réplica que pretende dar la semana que viene a la denuncia hecha pública este jueves por un grupo de padres y madres molestos con la gestión de la directiva. El mandatario del club pistacho negó a la mayor todas las acusaciones emitidas por Pere Valero, portavoz de este grupo de familiares y candidato a la presidencia de la entidad. Díaz admitió que prefiere guardar silencio y responder a las críticas en una rueda de prensa que convocará el lunes o el martes de la próxima semana. No obstante, se pronunció acerca de cuestiones como la presunta falta de legitimidad del proceso electoral, como denunció Pere Valero, la falta de equipaciones para los jugadores del club de fútbol o la opacidad en las cuentas del club.
«De momento voy a estar callado porque estamos en proceso electoral, quiero contestar y que estén todos los medios de comunicación presentes, como estuvieron el jueves», interpeló ayer el mandatario, que no pudo ocultar su sorpresa ante el rechazo de parte del entorno del club.
«No tienen ninguna razón. Claro que estaba anunciado desde principio de temporada que habría elecciones. Pero nadie se ha apuntado, además, ni son socios ni nada. Han tenido tiempo durante la temporada, pero no lo han hecho», explicó el presidente, que recordó que la cuota extra de 20 euros para hacer socio a uno de los padres de los niños «correspondía al primer año» de legislatura, en la temporada 2011-12. «Aquel año se subió de 280 a 300 euros la cuota y se les regalaba un carné de socio. Han pasado tres años y ninguno se ha puesto al día», precisó. Díaz negó que los futbolistas del club carezcan de equipaciones apropiadas y emplazó a sus detractores a que vean «el almacén de ropa del club». Por último, Manolo Díaz adelantó que presentará su candidatura a las elecciones con el objetivo de liderar su segunda legislatura al frente del CD Puig d'en Valls.