El Harinus Peña Deportiva no parece estar por la labor de coquetear con el descenso y se ha puesto manos a la obra para reforzar la plantilla. Francisco Eduardo Inza, entrenador del equipo, considera necesaria la llegada de refuerzos porque «hay una plantilla corta» y el inicio liguero no ha sido precisamente el mejor.
«Hacen falta más jugadores», afirmó ayer el técnico. «Si podemos, haremos fichajes. Hemos preguntado al club a ver si puede aportar algo más de dinero y a ver lo que tenemos. De lo contrario, a ver si encontramos algún patrocinador o algo, porque somos muy pocos. Hay diez jugadores de campo y la plantilla es muy corta», explicó el preparador de los peñistas.
Sobre si tiene algún perfil concreto de las adquisiciones que serían necesarias, indicó: «Buscamos jugadores que tengan algo de experiencia en Segunda B y, sobre todo, suban el nivel actual. Si pueden ser de corte defensivo, un ala o ala-cierre, mejor, pero tienen que ser jugadores que suban el nivel, no que vengan a ser uno más. Tienen que ser mejores que los que hay y ya tenemos jugadores buenos».
Tras dos semanas en la isla, Inza es consciente de las limitaciones existentes en la plantilla y que hacen que el equipo se encuentre actualmente en la zona de descenso. El pasado sábado, el Harinus Peña Deportiva cayó por 2-6 contra el Playas de Castellón, una derrota que, con todo, considera que «fortalece mentalmente al equipo».
Por otro lado, Inza confirmó que no se marchará, algo que Estefan Lanchon, jugador y directivo de fútbol sala de la Peña Deportiva, avanzó anteayer en el programa televisivo Dxtef. El entrenador estaba disconforme con la vivienda que le ofreció la entidad peñista y solicitaba una solución para poder traer a su familia. El andaluz confirmó que «parece ser que se va a solucionar y, en un principio, no me voy. De hecho, vamos a sacar billete para que vengan mi mujer e hijo esta semana. Confío en la palabra del presidente. Si dice que lo va a solucionar, será así».
Inza comentó que «a Estefan le llamó el presidente y le dijo que se encargaría personalmente de arreglarlo. Me dijo que confía plenamente en él y nunca le ha fallado, así que esperaremos a que esta semana o la siguiente me reubiquen. Aguantaremos una do dos semanas para que le niño empiece a ir al colegio, se ubique y hacer la mudanza definitiva lo antes posible».