Con la imponente presencia de sus 2.13 metros de altura, Fernando Romay, miembro de aquella generación mítica de los Corbalán, Epi, Fernando Martín, Iturriaga o Chicho Sibilio, se convirtió ayer en Can Guerxo en todo un fenómeno de masas para los centenares de niños y de adultos que no dejaron pasar la oportunidad de fotografiarse in situ con el veterano pívot del Real Madrid.
—Fernando, es usted toda una leyenda viva dentro de la historia del baloncesto español. ¿Qué supone para usted estar en Ibiza y participar en estas jornadas de formación de baloncesto con los niños y niñas de la cantera pitiusa?
—Bueno, lo primero que quiero decir es que estoy muy encantado de tener la posibilidad de volver a visitar Ibiza y muy contento de poder estar presente aquí junto a todos estos chicos de la cantera de los equipos de la isla. Como en todas las jornadas que se dedican a formar a estos chavales, el objetivo es, ni más ni menos, que fomentar la ilusión de los niños con algo tan sumamente beneficioso para ellos como es la práctica de una actividad deportiva, como es en este caso, la del baloncesto.
—¿Qué es lo que diferencia al baloncesto de otros deportes?
—Diría que el baloncesto es un deporte que atiende mucho a los valores que su práctica conlleva, por encima de lo que es la competición pura y dura.
—¿Qué considera imprescindible a la hora de trabajar con la cantera?
—La creación de ilusión en los chavales es fundamental en el proceso de formación de los jugadores de cara al futuro. Ver que estos chicos entrenan y que se esfuerzan por mejorar día a día es una gran recompensa. Quiero aprovechar esta ocasión para hacerle un homenaje a esos entrenadores que se pasan todas las tardes en los patios de los colegios o en los polideportivos enseñando a los chavales los fundamentos del baloncesto, ya que la labor que realizan es muy loable en todos los sentidos.
—¿Qué opinión le merece que en Ibiza, a pesar de la pujante cantera de jugadores jóvenes, no haya ningún equipo de mayores que juegue en una liga competitiva y que les pueda servir de referencia?
—Bueno, pienso que lo que se deben hacer son buenos proyectos que cuenten con una base sólida que les permita llegar hasta arriba. Si no hay posibilidad de tener un equipo de ACB, puede ser interesante tenerlo de LEB o en la EBA, para que todos estos chicos puedan contar en la isla con un referente claro que les haga de espejo en el que puedan mirarse, verse reflejados y poder jugar en el día de mañana emulando a los mayores. Es curioso, pero estamos en Baleares, que es una de las comunidades que más internacionales tiene en la actualidad jugando con la selección, algo que denota la buena labor que se hace desde la base en los diferentes clubes.
LA FICHA
DNI. Fernando Romay Pereiro (A Coruña, 23-09-1959).
PALMARÉS. Durante su trayectoria profesional como jugador del Real Madrid ganó 7 ligas, 5 Copas del Rey, 1 Supercopa de España, 2 copas de Europa, 3 Recopas de Europa, 1 Copa Korac, 2 Copas Intercontinentales, 1 Copa Mundial de clubes, 4 Supercopas europeas y 11 Torneos Internacionales de Madrid.
Con la selección española el pívot del Real Madrid se colgó sendas medallas de plata en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles (1984) y en el Eurobasket de Francia (1983).