HC EIVISSA: 19
LEVANTE MARNI: 15
Un minuto. Ése es el tiempo que aguantó el Levante Marni al HC Eivissa, que regresa por sus fueros tras cargarse a un rival directo en la pelea por las dos primeras posiciones. El equipo ibicenco se impuso por 19-15, recupera la segunda plaza –a expensas de lo que haga hoy el Almoradí en su enfrentamiento contra el Elche– y reduce distancias con el líder, que pinchó ayer.
La máquina naranja volvió a ejercer como tal gracias, sobre todo, a su solidez defensiva y las paradas de Gamallo. En los primeros minutos de juego allanó el camino hacia la victoria al plantar un muro en la retaguardia y sacar provecho de sus ataques para adquirir una buena ventaja.
El tanto inicial de Chumillas a los 40 segundos no fue más que un espejismo. Del 0-1 se pasó a un 4-1 en siete minutos. La renta aumentó hasta los cuatro goles antes del descanso, al que se llegó con 9-5 en el electrónico merced a una última diana de Santi Maíllo que firmó las dos últimas de los suyos en este primer periodo.
Tras el descanso, el HC Eivissa siguió mostrándose muy sólido atrás hasta el punto de que los levantinos tardaron casi siete minutos en marcar. Antes, Marc Torres y Olea se habían encargado de incrementar la máxima ventaja local hasta los seis goles (11-5, min. 34).
Los visitantes llegaron a reducir la distancia a tres (13-10, min. 46), pero los de Eugenio Tilves no estaban por la labor ya no sólo de ceder algún punto, sino ni de sufrir, y con tres goles consecutivos de David Sala dejó le partido visto para sentencia a falta de diez minutos (16-10). Esa ventaja de seis goles se mantuvo hasta el minuto 57 (19-13). Con la victoria en el bolsillo, el Levante Marni maquilló un poco el marcador (19-15) ante un máquina naranja que vuelve a dar miedo.