Moussa Sidibe, exjugador de la UD Ibiza y actual futbolista del Club Deportivo Guadalajara, emitió a través de las redes sociales un comunicado en el que afirmó encontrarse en «una situación crítica» por los impagos del club. «Les explico que no tengo dinero para comer y me dicen que pida ayuda a los amigos», indicó en su nota.
«Ante la irregularidad en los pagos que mantiene el Guadalajara, he solicitado mi baja tanto al presidente como al entrenador, ya que mis padres no pueden enviarme dinero todos los meses y estoy en una situación crítica. Habiéndome escuchado ambos, me dicen que no me darán la baja y que tengo que seguir entrenando y jugando en el club porque tengo contrato. Les explico que no tengo dinero para comer y me dicen que pida ayuda a mis amigos», señaló el malí de 22 años, que vive en España desde que tenía nueve, en su cuenta de Twitter.
El futbolista añadió que está dispuesto a perdonar la deuda –dice que su última nómina fue la de octubre y no ha cobrado ciertas primas– con tal de irse: «Me apasiona el fútbol y me gustaría seguir jugando. Estoy dispuesto a perdonar la deuda que tienen conmigo y olvidar de una vez esta pesadilla. Tengo clubes interesados en mí que pueden darme una estabilidad económica para poder seguir disfrutando de este deporte además de no ser un gasto para mis padres».
Tras emitir el comunicado, el club no permitió a Moussa entrenarse ayer con la plantilla.