Pablo Alfaro, entrenador de la UD Ibiza, aseguró ayer que tanto este tramo final de temporada como las jornadas anteriores son un examen para los suyos de cara a la configuración de la plantilla de la próxima temporada. «Estamos en evaluación continua», dijo.
«Ahora se ve el grado de implicación real de la gente, las ganas que pueden tener por seguir en este proyecto y las ganas de ganar tres puntos. Tenemos el reto de ser capaces de funcionar al mismo nivel que hemos hecho contra los mejores rivales», explicó en la rueda de prensa ofrecida en el estadio de Can Misses.
El técnico tiene claro que todos se juegan mucho: «Os garantizo que ningún futbolista del Ibiza se va a retirar este año. Siguen examinándose de cara a lo que queda de competición. El partido contra el Jumilla es para nosotros lo más importante. No podemos ni vamos a tirar ningún partido, menos teniendo en cuenta que el domingo el Jumilla nos va a plantear muchísimas dificultades».
Alfaro dejó claro que él liderará el proyecto 2019-20: «Si no, no habría venido a la isla. Se trataba de saber lo que había esta temporada y empezar a competir ya. Vine un jueves y el domingo ya había partido. Desde el primer día vine para construir a corto o medio plazo lo que queremos que sea la UD Ibiza. Se van dando pasos poco a poco, teniendo un estilo, un sello y unas características».
Sobre la Copa del Rey, el míster recordó que, como aún están pendientes de saber qué pasará con el posible nuevo, no merece la pena «elucubrar» y hay que centrarse en el Jumilla. El técnico, que ayer celebraba su cumpleaños, confesó que a los suyos les pide «los tres puntos, que será el mejor regalo que podemos tener para seguir con esta progresión».