La trigésimo tercera edición de la Ruta de la Sal ya está en marcha y fue presentada ayer en el Salón Náutico Internacional de Barcelona. En el acto estuvieron presentes Marcos Serra, alcalde de Sant Antoni; Miquel Tur, regidor de Turismo del Ayuntamiento de Sant Antoni; Julia Casanueva, presidenta de la Real Federación Española de Vela, y Xavier Planas, comodoro del CN Sant Antoni, entre otras personalidades.
Este evento reunirá a los navegantes y aficionados de esta regata a mar abierto, en la que participa un gran número de tripulaciones y skippers, tanto españoles como extranjeros, en una de las concentraciones náuticas más importantes del Mediterráneo.
La Ruta de la Sal, la regata de altura más consolidada y con mayor participación del Mediterráneo, es una emblemática prueba con tres salidas diferenciadas: CM Port Ginesta (Barcelona), RCN Dénia (Alicante) y CV Port Andratx (Mallorca). El objetivo en cada una de las tres vertientes es alcanzar Ibiza, más concretamente el CN de Sant Antoni.
La regata se iniciará el 9 de abril con un tope máximo de 200 embarcaciones, que supondrá la participación de unos 1.500 regatistas y el desplazamiento a la isla de muchos familiares y amigos que siguen a los regatistas, lo que consolida una vez más a La Sal como líder en este tipo de pruebas náuticas.
Para la edición 2020 está también programada la regata inshore de 10 millas náuticas, dentro de la bahía de Sant Antoni de Portmany, que se realizará el domingo 12 de abril. En ella podrán competir los equipos inscritos de las tres diferentes versiones de La Sal.
Una vez más, La Ruta de la Sal se reafirma como el evento náutico deportivo que más ha contribuido de una manera decisiva, durante los últimos 30 años, a fomentar y pro mocionar la navegación de crucero en nuestro país y poner a la isla de Ibiza y Sant Antoni de Portmany en el centro de la náutica mediterránea.
Para esta edición ya hay preinscripciones de armadores de Rusia, Italia, Holanda, Alemania, Inglaterra, Suiza, Luxemburgo, Portugal y, muy especialmente Francia, que, en su mayoría, provienen de puertos de las costas mediterráneas del Languedoc-Rosellón y Provenza-Costa Azul.