El entrenador de la Real Sociedad B, Xabi Alonso, salió ayer en rueda de prensa con cara de pocos amigos, tras finalizar el choque entre la Real Sociedad B y la UD Ibiza.
Un semblante motivado por la derrota de su equipo en los últimos compases de la segunda parte y por su expulsión, por protestar al árbitro, tras el gol de los ibicencos. «Vemos que, antes de que la UD Ibiza consiguiese materializar su ocasión, hay una falta clara del delantero sobre nuestro defensa», puntualizó en rueda de prensa. En este sentido, Alonso destacó que el choque fue rocoso y muy cerrado. «Los detalles han decidido el partido y la mala suerte ha querido que no cayera de nuestro lado», destacó.
El míster afirmó que, pese a las últimas tres derrotas, el equipo está fuerte y motivado. «Tenemos que darle la vuelta a la situación. Hay que seguir trabajando porque esto puede cambiar de un día para otro», subrayó el técnico del Sanse ante los medios.