El Sant Jordi es uno más de los clubes afectados por la actual crisis de la COVID-19 y no le ha quedado otra que proponer una rebaja salarial del 25 por ciento a su plantilla, como adelantó en exclusiva Periódico de Ibiza y Formentera el 24 de diciembre del año pasado. La entidad verdinegra abrió también las puertas a quien quisiera marcharse y son cuatro las bajas que ha sufrido. Josep Díez, Rubén Sánchez y Alejandro López fueron los primeros, como avanzó este rotativo el día 28 del mes pasado, a los que sigue ahora Ren Kurosawa.
Además, la continuidad de futbolistas como Rafa de las Heras, José Carlos Moreno y Nacho Rosillo está en el aire. Pese a todo, Josep Riera, presidente del Sant Jordi, confía en que el club salga adelante: «Queremos que se solucione todo y pondremos todos los medios». Eso sí, advirtió que «hay que estar preparados» para lo que pueda pasar.
El mandamás verdinegro restó dramatismo al asunto porque «parece que no es normal por el hecho de salir en las noticias, pero a la sociedad no le va bien y, por tanto, tampoco al club». «Si nuestros patrocinadores están cerrados, hay que prever que pueda haber una rebaja en cuanto a las primas por jugar en Tercera. Esto es fruto de la situación que vivimos. Nosotros no vivimos en una cajita mágica donde todo está bien. A la sociedad no le va bien; tampoco al club. En este caso, hay que estar preparados porque no sabemos qué pasará. Haciendo referencia a nuestros principales patrocinadores, que son del ocio legal, porque el ilegal sí está abierto, pues una empresa cerrada difícilmente podrá colaborar», dijo.
Sobre cómo se lo ha tomado en la plantilla, Riera indicó: «Los jugadores lo han aceptado muy bien. Las salidas que han habido las habríamos tenido igualmente. López lleva tres meses lesionado. Josep tenía una serie de problemas personales. Rubén ya tenía una oferta y últimamente no contaba con todos los minutos. Cuando a uno le sale una oferta a media hora de su casa en coche, es normal que se lo piense. La baja que más nos va a perjudicar es la de Ren, pero da el salto al fútbol profesional japonés y tampoco le podemos decir que no».
Las bajas alivian tímidamente la situación económica de un club que contaba con un presupuesto inicial de unos 150.000 euros y que se ve afectado «en un 30 por ciento», según su presidente. «Las bajas siempre te alivian, pero lo que te tiene que aliviar es lo que te tiene que aliviar –los patrocinadores–. Se resiente todo el tejido empresarial y se resiente el deporte. Si en dos meses todos estamos a tope con todas las empresas abiertas, se verá alegría en la gente y también en el deporte», continuó.
En el plano deportivo, el conjunto jordier se encuentra a solamente dos puntos de la zona de playoff de ascenso. Sobre cómo puede afectar esto, Josep Riera afirmó que «no parece que esté afectando». «Las bajas, excepto la de Ren, no estaban entrando al cien por cien en las convocatorias. Entonces, futbolísticamente no hay merma. Sí que tenemos que ir ahora a Manacor, que es un campo muy complicado y está fuerte, pero el equipo está bien», expuso.
Con todo, el mandamás verdinegro recalcó que «el objetivo es salvar la categoría». «Si luego se hace un buen papel, pues muy bien, pero hay que salir a salvar la categoría porque este año bajarán muchos equipos».