Biel Gili Nadal (Artà, 8-11-1974) encadena su tercer mandato al frente de la Federación Balear de Atletismo. Directivo de la Española y exdirector general de Deportes del Govern estuvo este fin de semana en la pista de atletismo para seguir in situ la celebración del Campeonato Balear de Invierno. Además, aprovechó la visita para reunirse con los responsables de este deporte en la isla y el Ayuntamiento de Vila.
—¿Qué tal por Ibiza? ¿Qué se ha encontrado?
—Siempre es un placer venir. Nos gusta mucho estar aquí y nos hemos encontrado unas instalaciones adecuadas para celebrar el campeonato. Además, da gusto ver tanta gente en las gradas.
—¿Cómo ha ido la reunión con el Ayuntamiento después del encontronazo que hubo en verano por la cesión de uso de la instalación?
—Sí, hubo un poco de encontronazo porque nosotros tenemos que defender el atletismo y entendíamos que perdíamos una pista de atletismo para convertirse es una pista polideportiva en la que no seríamos los actores principales y no queríamos que eso sucediera. En cuanto a la reunión, vino la concejala de Deportes, Elena López, y estuvimos media hora revisando las instalaciones y hablando del uso y del material. Fue una reunión cordial en la que intercambiamos puntos de vista sobre la gestión de la pista. Sobre todo, le insistimos de la necesidad que hay de renovar parte del material deportivo, que me costa que ellos están trabajando en ello. Por lo demás, les dijimos que no podíamos dar pasos atrás y que hay que seguir hacia adelante, colaborando como hasta ahora.
—Habla de renovación de material. ¿Está muy obsoleto?
—No, pero cuando una instalación utiliza el mismo material para entrenar que para competir, el desgaste hace que vayas muy justo. Si, por ejemplo, se rompe un saltómetro en un entrenamiento, eso hace que no puedas realizar una competición de salto porque no tienes un recambio.
—No sé si han hablado sobre el proyecto de hacer un campo de lanzamientos en un terreno anexo a la pista de atletismo.
—Sí. Era algo que yo solo conocía por la prensa y por lo que me habían comentado desde Ibiza, pero no de manera oficial. Les pregunté que si iba en serio y me dijeron que sí, que iba muy en serio. También me dijeron que iban a construir un nuevo campo de fútbol. Todo lo que sea ayudar al atletismo estaremos siempre a favor. Si la opción para que los lanzadores puedan entrenar más y mejor es hacer un anexo, pues bienvenido sea.
—Más allá del tema de las instalaciones, ¿cómo está la salud del atletismo balear?
—Está mejor que nunca. A día de hoy, sin contar la categoría de veteranos, tenemos casi 50 personas entre los ocho mejores de España en sus disciplinas. Tenemos nueve internacionales. En cada categoría, sub-18, sub-20, sub-23 y absoluto, tenemos representación internacional. Hemos tenido dos olímpicos, uno de ellos Marc Tur, de aquí de Ibiza. Yo creo que la salud entre salud, resultado y número de licencias, nunca habíamos tenido estos números.
—Aquí en esta cita de Ibiza uno de los nombres que ha brillado con luz propia es Imad Ahajjam, primero en 800 y 1.500 metros.
—Es un chico que tiene muchísima calidad, pero que, a veces, es muy irregular. Parece que ha empezado bien. A ver si ya ha superado sus dudas y puede conseguir también a nivel nacional. Es un chico que puede brillar porque tiene unas condiciones brutales. Su calidad es enorme. Lo único que falta es que dé el pasito porque las condiciones las tienes.
—Hablando de nombres propios, lo mencionaba antes: Marc Tur, que se podría decir que es el abanderado del atletismo balear.
—Sí, hoy en día es la gran referencia. Tener un chico campeón de Europa y cuarto en unos Juegos Olímpicos… Estamos encantados y súper orgullosos porque es el ejemplo de persona que tenemos que promocionar. Un chico implicado en el deporte, estudiando Medicina. Es un ejemplo para todos, es una persona a la que se debe promocionar.
—¿Cómo vio esos 200 metros finales en los que se le escaparon las medallas en Tokio?
—Te diré la verdad. Estábamos en un Campeonato de España en La Palma. Estábamos con el equipo técnico viéndolo y los últimos metros salí al balcón porque no quería verlo. Estaba recibiendo llamadas de celebración y a mí me gusta celebrarlo cuando sucede y salí al balcón porque no lo quise ver. Luego sí vi las imágenes. Desgraciadamente se le escapó, pero ser cuarto en unos Juegos está al alcance de muy pocos.