Siempre se suele decir que todos los partidos y todos los puntos tienen el mismo valor. Eso es así hasta que la clasificación dice lo contrario y llegas a la última jornada con ciertos apuros. La UD Ibiza HC Eivissa se juega este sábado en es Pratet (19.00 horas) la permanencia ante el Sant Quirze.
Los de Eugenio Tilves llegan a esta fecha en sexta posición, lo que les haría caer al grupo por el descenso. Eso sí, una victoria les podría dar la posibilidad de adelantar puestos en la clasificación y jugar en el grupo por el ascenso. Las cuentas son sencillas para los ibicencos: ganar y esperar.
Aguardar a lo que ocurra en Sarrià, donde el Alarcos Ciudad Real se jugará sus opciones. En este polideportivo valdría un empate para igualar a puntos a los visitantes y superarles por el golaverage.
El otro partido clave se juega en Alicante y enfrenta al Sporting Alicante con el Trops Málaga, los otros dos equipos que están metidos en el ajo. Aquí el empate salvaría a ambos y sería un mal resultado para los intereses pitiusos. La victoria de cualquiera de los dos haría que el derrotado cayese al grupo de descenso.
Cuentas por el descenso
Todo esto siempre y cuando la UD Ibiza HC Eivissa haga sus deberes y logre los dos puntos. De todo esto es muy consciente Tilves. El técnico señaló que la importancia de este partido está más allá de jugar en el grupo por el ascenso o por el descenso. Obviamente poder certificar la permanencia el sábado sería toda una liberación, pero en caso de que los resultados de los otros partidos no acompañasen, ganar al Sant Quirze es muy importante de cara al grupo por el descenso.
Hay que tener en cuenta que los equipos arrastran a la siguiente fase los puntos que hayan logrado contra los equipos que juegan esa fase. Es decir que aunque en la clasificación los ibicencos tienen actualmente cuatro puntos más que los catalanes, en caso de que el Sant Quirze ganase, serían estos los que pasarían a la siguiente fase con ventaja.
Una victoria ibicenca haría que pasasen al grupo de descenso con 12 puntos de los 16 posibles. Una cifra nada desdeñable de cara a jugar una liguilla de 10 equipos en los que cinco pierden la categoría. Además, en esta fase solo se juega contra los equipos que vienen desde el otro grupo.
«El Sant Quirze ya sabe que jugará el grupo de descenso y vendrán a darlo todo porque si nos meten a bajo saben que pasan a la siguiente ronda con cuatro puntos porque nos han ganado en la ida. Para ellos es muy importante ganarnos y que seamos nosotros los que vayamos al grupo de descenso. No a ser para nada fácil», explicó Tilves.
El preparador gallego destacó que se trata de un rival que «está compitiendo bien» y que destaca por su dinamismo «con gente no muy alta, pero sí muy viva». «Es un equipo de mucha calidad con jugadores que vienen de la cantera del Barça y el Granollers. Hacen una buena defensa y les gusta mucho correr», advirtió el técnico celeste.
En cuanto a lo que tiene que hacer su equipo, lo tiene muy claro: «Si queremos competir tendremos que sacar nuestra mejor versión en defensa, correr un poquito, pero, sobre todo, no tener pérdidas a nivel ofensivo. Debemos tener mucha paciencia y saber que será un partido muy duro a nivel mental».
Clave será, una vez más, que el duelo se jugará en Es Pratet, una pista en la que los ibicencos se crecen por el apoyo de una grada que está mucho más cerca y se hace sentir.