Otro revés. Uno más. La UD Ibiza encajó en la noche de este martes su novena derrota en 14 jornadas y quinta consecutiva tras caer por 0-2 contra el Leganés en el Palladium Can Misses. Un gol en el último suspiro de cada mitad brindó los tres puntos al conjunto madrileño, que se mostró superior a una escuadra pitiusa que ni funciona ni transmite buenas sensaciones.
Juan Antonio Anquela introdujo tres modificaciones con respecto al once del sábado. Dejó en el banquillo a Coke, Gálvez y Appin para dar entrada a Zé Carlos, Martin Pascual y Álvaro García. El técnico linarense apostó por un cambio de dibujo con el objetivo de reforzar la retaguardia. Y es que ya dejó claro que lo primero que hay que hacer es no encajar goles. De paso, con dos carrileros en una defensa con tres centrales podía nivelar fuerzas en la medular ante un cuadro pepinero que viene jugando con un 5-4-1. Imanol Idiakez también realizó cambios en su alineación, algo poco habitual en las últimas fechas. Y no hizo uno, dos o tres, sino cuatro: Sergio González, Fede Vico, Raba y Rubén Pardo por Durmisi, Gaku, Cissé y Juan Muñoz.
El partido arrancó con una pronta llegada de los visitantes. A los dos minutos, Fuzato repelió un remate tras un saque de esquina y la pelota le quedó a Raba al filo del área pequeña, pero sorprendentemente disparó a las nubes. Cinco minutos después, Rubén Pardo disparó al palo corto desde el interior del área, pero el cancerbero italiano despejó el esférico con los pies.
La Udé apenas se dejó ver en ataque. Es más, Martín Pascual tuvo que lanzar desde muy lejos para tratar de crear peligro en una acción que detuvo Riesgo con excesiva facilidad.
Hubo poco fútbol en el coliseo ibicenco, donde las escasas ocasiones de gol fueron para los madrileños. Mediado esta primera parte, Sergio González remató fuera en el segundo palo una acción de córner. En la recta final, de nuevo Sergio González protagonizó un buen remate de cabeza que el guardameta local despejó con acierto, el mismo que le faltó en un posterior centro-chut de Fede Vico que se marchó fuera por poco en la continuación de la jugada.
Cuando todo hacía indicar que se tomaría el rumbo a vestuarios con el empate a cero, Raba aprovechó el último ataque visitante para romper el ‘cerocerismo'. Recibió de su portero el balón en la medular, se giró con un espectacular control orientado para dejar atrás a Álvaro García y metió entonces la quinta para plantarse en la media luna del área y enviar el balón a la escuadra al ver que nadie le presionaba. Golazo.
El partido se reanudó con un doble cambio por parte de los locales. Álvaro García y Zé Carlos dejaron su sitio a Bogusz y Coke. El dibujo cambiaba a un 4-2-3-1, con mayor potencial ofensivo para tratar de nivelar la contienda.
Con todo, lo cierto es que la UD Ibiza seguía sin dar con la tecla. Es más, de nuevo Raba se marcó una buena jugada personal que finalmente se fue al limbo tras elegir la peor opción en los metros finales.
Goldar, al larguero
A pesar de la falta de ideas en ataque, el conjunto celeste tuvo una buena opción para empatar a balón parado. En un saque de esquina, Goldar cabeceó la pelota al larguero. Poco a poco, el cuadro ibicenco empezó a ofrecer mejores sensaciones. El técnico local apostó entonces por refrescar su ataque con la entrada de Suleiman, Isma Ruiz y Appin por Herrera, Iván Morante y Nolito, respectivamente.
El Lega centró sus esfuerzos en cerrar espacios ante un cuadro pitiuso que mejoró sus prestaciones con respecto al primer tiempo, si bien le faltaba una marcha más a su juego para poder dominar a su rival. Y es que, con todo, los pepineros tampoco es que se sintieran muy incómodos sobre el terreno de juego.
Los minutos pasaron con más pena que gloria, pero el cuadro unionista seguía vivo. Lo seguía hasta que el recién incorporado Naim puso la puntilla al filo del 90 tras rematar a placer en el segundo palo un pase lateral de Fede Vico. Muchos aficionados celestes comenzaron a desfilar para abandonar el estadio a pesar de que aún quedaban ocho minutos de prolongación. Ese tiempo se consumió sin apenas novedades y la UD Ibiza encadenó así su quinta derrota consecutiva, novena de la temporada y segunda en dos partidos con Anquela en el banquillo. La crisis continúa en una Udé que marcha cuesta abajo y sin frenos.