La clasificación del CD Ibiza para la segunda ronda de la Copa del Rey abre un nuevo melón en el Ayuntamiento de Eivissa, dirigido por Rafa Ruiz y cuya concejalía de Deportes preside Elena López. Ante la posible visita de un equipo de Primera División (un 92,3 por ciento de posibilidades), lo más normal es que el encuentro se celebre en el estadio Palladium Can Misses por la magnitud del evento, el nivel del rival y el interés que puede despertar entre la ciudadanía el hecho de ver a un grande del fútbol español en vivo.
Can Misses 3 apenas tiene capacidad para 600 espectadores, cifra que no anduvo lejos de completarse en la eliminatoria anterior del Cedé contra un rival de Primera RFEF, el Rayo Majadahonda. En cambio, el Palladium Can Misses puede albergar más de 6.000 aficionados en la grada y la visita de un conjunto de Primera parece una razón más que suficiente para que el choque se celebre ahí.
Motivos hay de sobra para que el duelo se dispute en el principal estadio de la isla: la entidad del rival, la calidad de las instalaciones, la iluminación, la cobertura por parte de los medios de comunicación con su correspondiente retransmisión televisiva, y la más que probable opción de que sean, obviamente, más de 600 personas las interesadas en presenciar un histórico duelo, el primero del cuadro rojillo ante un rival de la máxima categoría nacional.
Visitas contadas
Hasta ahora, solamente siete clubes de Primera División han disputado un partido oficial en las Pitiusas: el Atlético de Madrid, que se midió al Portmany en 1983; el Sevilla, que jugó contra el Formentera en 2016; el Athletic, que se enfrentó a los rojinegros en 2017 y a la UD Ibiza en 2021; el Alavés, que visitó Sant Francesc en 2018; el Barcelona, que superó in extremis a la Udé en Can Misses ante unos 6.500 aficionados en enero de 2020; el Celta, que cayó contra los unionistas por 5-2 en enero de 2021, y el Valladolid, que se midió a la Peña Deportiva en enero de 2021. Por tanto, si el sorteo no juega una mala pasada, Ibiza disfrutará de una oportunidad única para ver a un grande del fútbol nacional, un evento que muy pocas veces se ha podido vivir.
La temporada pasada, el CD Ibiza también ya vivió un encuentro histórico en Copa al medirse al Tenerife, de Segunda División. Eso sí, se le negó la opción de jugar en Can Misses. El sorteo se realizó el 19 de noviembre y la eliminatoria se jugó poco más de diez días después. Ahora, la situación es muy diferente y, teniendo en cuenta lo que dice el convenio de cesión firmado entre el Ayuntamiento de Eivissa y la UD Ibiza, la pelota está sobre el tejado del Consistorio.
La cláusula
En las cláusulas de dicho convenio, el apartado segundo sobre los ‘Derechos del Ayuntamiento de Eivissa' descritos en las ‘Obligaciones y derechos de las dos partes', señala lo siguiente: «El Excmo. Ayuntamiento de Eivissa se reservará la utilización de los bienes cedidos, con fines tanto deportivos como extradeportivos, cuando las características que concurren en el recinto sean idóneas para la celebración del evento que se trate. Este uso no podrá perturbar ni interferir en la programación deportiva del cesionario, salvo casos de fuerza mayor, y deberá ser comunicada con una antelación mínima de 30 días, fijándose de común acuerdo los horarios y fechas de utilización y el retorno de todos los espacios deben quedar en perfectas condiciones para el desarrollo de la actividad deportiva por parte del club».
Así las cosas, teniendo en cuenta que la eliminatoria se disputará el 21 de diciembre, el evento cumple con los plazos para que Can Misses pueda albergar esta eliminatoria de Copa del Rey. Habrá que ver qué depara este miércoles el sorteo (Ciudad del Fútbol de Las Rozas, 17.00 horas). Si bien la visita incluso de un rival de Segunda podría ser motivo suficiente para que esta opción se contemple, es el Ayuntamiento el que tiene la palabra.