Sonrojante ridículo de la UD Ibiza en Ceuta. Cualquier calificativo de ese tipo se queda corto para la imagen que han dado los ibicencos en la ciudad autónoma situada en tierras norteafricanas. El colista del grupo primero de Primera RFEF le ha sacado los colores a los celestes que se pusieron por delante en el marcador, pero vieron cómo les levantaban el partido. El 3-2 es un triste final de año para un equipo que está muy lejos de ilusionar como no hace tantos meses. Los jugadores que han jugado este miércoles la Copa del Rey no han dignificado el escudo. Se esperan muchos cambios estas navidades.
El partido comenzó de la mejor manera posible. No habían pasado ni cinco minutos cuando en la que era la primera llegada se adelantó la UD Ibiza. Un centro desde la banda izquierda fue desviado por el defensor del Ceuta, Robin, que introdujo el balón en su propia portería.
Los celestes eran los dominadores de estos primeros minutos, jugando cómodos y más aún con el marcador a favor. En una de las primeras acciones en la que se estiraban los locales, el árbitro señaló una peligrosa falta en la frontal del área. La falta era muy peligrosa y Ñito González la convirtió en gol con un buen disparo ajustado al que no pudo llegar Germán.
Tras el gol, la Udé se volvió a hacer con el mando del partido, tuvo un par de buenas llegadas en las botas de Armando y Nolito, pero sin éxito. El que no perdonó en su segunda llegada fue el Ceuta que en una acción de balón parado logró darle la vuelta al partido. El balón voló al segundo palo, un atacante de los africanos mandó el balón hacia el otro palo, donde apareció Rodri Ríos para poner el 2-1.
Los ibicencos volvieron a hacerse con el mando del juego, pero evidenciaban los mismos problemas que arrastran a lo largo de toda la liga. Apenas inquietaron a un equipo que con la ventaja en el marcador empezó a hacer su partido. Parecía que con el 2-1, se llegaría al descanso, pero fue entonces cuando Nolito frotó la lámpara para sacar un gran pase a Ekain que puso el 2-2.
La segunda parte arrancó con un jarro de agua fría. Ñito González recibió en la frontal del área y se sacó un magnífico disparo para poner el balón lejos del alcance de Germán y poner el 3-2.
Ekain intentó responder por la vía rápida y dos minutos más tarde reventaba el balón contra el larguero en un buen disparo desde dentro del área. Reaccionaba la UD Ibiza o al menos parecía que lo hacía porque lo cierto es que en los siguientes minutos apenas pisó el área ceutí.
A la hora de juego se reclamó penalti sobre Armando, pero el árbitro no lo estimó así y acabó sacando a Armando y Nolito por protestar. Poco después, estuvo cerca de lograr el empate Diop en un remate de cabeza a la salida de un córner. Pasado el 65, gol anulado a Nolito que se saldó con un nueva amarilla por protestar, en esta ocasión para Herrera.
En la recta final, Liberto perdonó el 4-2 y Alcaraz metió más hombres de ataque para buscar un gol que les diese vida en la eliminatoria. El equipo tuvo muy poco fútbol. Poquísimo. Apenas inquietaba a un Ceuta que se defendía con orden. Ocho minutos de descuento. El portero de los africanos era un espectador más. Así fue hasta el minuto 96 cuando Montagud hizo una de las paradas de la temporada para evitar el empate de Goldar a la salida de un saque de esquina. La tuvo el conjunto celeste. No entró. El ridículo se confirmó. La UD Ibiza se queda fuera de la Copa ante el colista de Primera RFEF.