La UD Ibiza Gasifred ha dado este sábado un paso de gigante en sus aspiraciones de subir a Segunda División. Los ibicencos se han impuesto (2-4) al Salesianos en un partido muy igualado y disputado y en el que la suerte les ha sonreído, todo sea dicho. No hay nada decidido, pero sí hay una ventaja importante.
El partido comenzó con un ritmo trepidante. Con los locales metiéndole muchísima intensidad al encuentro y generando apuros a los ibicencos, pero sin crear grandes ocasiones de gol. De hecho la primera del partido llegó a los cinco minutos y fue para los visitantes. Vicent Valdés se fue del portero con una buena maniobra, también se marchó de un defensor, pero cuando bajo palos sólo quedaba un jugador canario su disparo no encontró los tres palos.
La UD Ibiza Gasifred había conseguido quitarse la presión local y empezaba a generar su fútbol, llegando a zona de peligro, pero sin encontrar disparos claros. Si fue claro el golpeo del propio Vicent Valdés cuando se superaba el minuto nueve. Un latigazo que se marchó rozando el palo. Acto seguido era Karpiak el que tenía que hacer dos paradas sensacionales.
A falta de siete minutos para el descanso estuvo a punto de llegar el gol local con un buen disparo cruzado de Isemán que tras superar a Karpiak se estrelló contra el palo. Se libraba el cuadro de José Fernández que estaba un poco nervioso en estos compases, que eran los mejores de los locales. El portero eslovaco era el gran protagonista.
Poco después, el canario Carlos reventaba el balón contra el larguero a falta de cuatro minutos. Eran los mejores minutos del Salesianos, pero lo que llegó fue el gol celeste. Vicent Valdés se encargó de silenciar al polideportivo canario con un magnífico disparo que sorprendió a Yeray. Con el 0-1 se llegó al descanso.
La primera de la segunda parte fue para los locales, pero entre Buitre y Karpiak lograron desbaratar la ocasión para desesperación del público local que veía que merecía más. La respuesta visitante en este periodo estuvo en las botas de Charly que se encontró con el pie de Yeray que se hizo grande. Unos segundos más tarde, el Salesianos se volvía a encontrar con la madera. Era la tercera vez que el palo les privaba del gol.
La suerte estaba del lado pitiuso en este partido y en el minuto cinco llegaba el segundo gol. Buitre disparaba, el balón tocaba en un defensa, se envenenaba y superaba a Yeray que había quedado vendido.
Con el marcador a favor, el Gasi replegó líneas, se encerró en su campo y dejó que el Salesianos tuviese el balón. El objetivo era claro, intentar forzar un error con el hacer daño. Buscaba el error el conjunto ibicenco, pero fueron los locales los que aprovecharon el error pitiuso. Un mal pase en la salida permitió a Luca recortar distancias cuando quedaban seis minutos por jugarse.
No habían pasado nada más que un puñado de segundos cuando Charly tuvo en su mano el tercero, pero su disparo con calidad se fue fuera por centímetros. Eso sí, el espigado jugador no falló en la siguiente que tuvo y cuando quedaban poco más de dos minutos hizo el 1-3 con un toque sutil tras un pase de Llamas.
Los ibicencos no se conformaron y Buitre hizo el 1-4 ya dentro del último minuto. Parecía que el partido ya estaba finiquitado, pero todavía hubo tiempo para que el cuadro tinerfeño apretase un poco más la eliminatoria para el partido de vuelta con un doble penalti a falta de cinco segundos.
Al final, 2-4. La UD Ibiza Gasifred da un paso importantísimo hacia un ascenso que se decidirá la próxima semana en sa Blanca Dona.