La SD Ibiza ha logrado este domingo una victoria que necesitaba como el comer. El equipo de Vila, ya mudado a su nueva casa, Sant Rafel, hizo bueno el gol de Diego Jiménez para tumbar al Alcoyano (1-0) y romper su racha de siete partidos sin ganar. El triunfo no sirve para salir del descenso, pero sí para recibir un chute de moral importante.
El partido arrancó con una buena combinación rojilla en la que el central le acabó ganando la partida a Montalbán. No tardaron los de Alcoy en trenzar también una buena jugada que acabaría en saque de esquina. Sin poco más que contar, se esfumaron los diez primeros minutos de juego.
En el 13, Edu Frías tuvo que aparecer por primera vez. El portero estuvo firme para repeler un buen disparo de Guille Andrés. El ex de la Peña Deportiva había enganchado un potente disparo desde la frontal que se convirtió en la primera gran ocasión del encuentro. Pocos minutos después intentó responder el cuadro de Casañ, pero el disparo de Montalbán fue bloqueado por un defensa.
El gol estuvo a punto de llegar en el 22. Álex Sánchez ganó la línea de fondo, encontró con el pase de la muerte a Marquitos, que disparó ajustado al palo y se encontró con una parada sensacional de Jagoba. Parecía un gol seguro, pero el portero respondió de manera extraordinaria. Un minuto después era Edu Frías el que brillaba. Iniesta disparó, el balón hizo un raro y acabó estrellándose en el palo. El rechace fue para Loren, que cabeceó en boca de gol para el 0-1, pero se encontró con una reacción felina de Frías, que venía desde el otro palo.
Dos ocasiones que fueron el anuncio del gol. Este llegó en el 26, en un saque de esquina. El balón voló al corazón del área, donde Diego Jiménez cabeceó picado para poner el balón lejos del alcance de Jagoba. Se adelantaba el conjunto de Raúl Casañ, que estaba cuajando un buen partido. El cambio de casa le estaba sentando bien a los de Vila.
El propio Jiménez estuvo providencial en el 29. La contra era mortal, pero Guille Andrés se durmió en el corazón del área y eso lo aprovechó el central para recuperar y limpiarle el balón. Se libraba la SD Ibiza, pues el Alcoyano les había cogido desprevenidos en una rápida transición.
En el tramo final de la primera parte, el partido siguió teniendo ritmo. Hubo ida y vuelta, pero sin ocasiones reales de gol. Así, los jugadores se marcharon a los vestuarios con ligera ventaja local. Todavía quedaban 45 minutos para que los rojillos se pudieran llevar la segunda alegría de la temporada.
La primera de la segunda parte fue para el Alcoyano. El cabezazo de Catalá se fue muy cerca de la portería de un Edu Frías que solo pudo mirar. Susto importante que hizo el silencio en Sant Rafel. Esta acción animó el partido y tuvo varias aproximaciones el cuadro ibicenco, pero sin terminar de encontrar el remate. Estaba dando una buena imagen.
Los entrenadores empezaron a mover el banquillo. Castro entró en las filas pitiusas, mientras que los de Alcoy hicieron tres sustituciones para intentar cambiar el rumbo del encuentro. Quedaba media hora de juego. También entraron Pepe Bernal y Rubén Carretero.
En el 66 la tuvo De Pedro, que acababa de entrar. El extremo enganchó un balón muy escorado, que se fue fuera, pero que volvió a ser un susto importante para Edu Frías. Empezaba a encerrar en su campo el Alcoyano a la SD Ibiza, que agotó sus cambios con la entrada de Manel y Moreno.
Pasaban los minutos e iban resistiendo los de Casañ. Con el 1-0 se entró en los últimos cinco minutos y fue entonces cuando se salvó el cuadro ibicenco. En un saque de esquina, Moreno remató en el primer palo y el balón se fue al palo. Después, en el rechace, el cuero se marchó por encima de la portería.
El partido entró en el descuento y tocaba sufrir. Un sufrimiento que se convirtió en alegría cuando Edu Frías repelió la última intentona visitante y el árbitro pitó el final. Un final polémico, en el que el portero alicantino vio la tarjeta roja directa.