El sábado falleció Antonio Cardona Bonet, más conocido como Toni Tieta. Nacido en Vila en 1945, destacó en el ámbito de la hostelería —fue uno de los primeros distribuidores de alimentos de la isla—, pero también ganó un nombre en el mundo del fútbol por su larga trayectoria en la directiva de Sa Deportiva, donde estuvo más de tres décadas.
En cuanto a su vida, empezó estudios de delineante, aunque no los llegó a terminar. Comenzó a trabajar como camarero en el Hotel Figueretes hasta que, en 1966, de la mano de Julià Verdera, se fue al Ibiza Playa. Se formó en la Escuela de Hostelería, llegando a ser metre. El propio Verdera, ya como presidente de Sa Deportiva, fue quien le introdujo en la directiva del club.
Fueron muchos años en los despachos, tiempo en el que vio pasar a diferentes presidentes como Miró, Bragantini, Mariano Noguera o Moreras, entre otros. Estuvo allí más de 30 años, hasta que se «hartó». En una entrevista en el Periódico de Ibiza y Formentera aseguraba que la gota que colmó el vaso fue el despido del entrenador Luis Elcacho.
En su vida personal se casó con Pepita, con quien tuvo dos hijos: Fina y Toni. Tras su etapa en los hoteles, dio el salto al sector de la alimentación, entrando en la empresa Benirràs Alimentación como jefe de compras. Finalmente montaría la empresa Exclusivas Tieta junto a Vicente Pardo y, posteriormente, también fundaría Distribuciones Tieta, dos firmas con las que se definía como «el rey de la alimentación en Ibiza durante 40 años».
Además del fútbol, Toni Tieta era muy aficionado a los caballos trotones, llegando incluso a tener en propiedad, junto a varios socios, uno de ellos: Umbrela.