El futbolista de la Unión Deportiva Salamanca Miguel García abandonó este mediodía el Hospital Clínico de Salamanca y ya se encuentra en su casa después de recuperarse del infarto de miocardio que sufrió el pasado domingo.
Acompañado por el director deportivo de la Unión Deportiva Salamanca, Baltasar Sánchez 'Balta', salió por la puerta principal del complejo hospitalario y agradeció el apoyo recibido por los compañeros, aficionados y medios de comunicación durante los últimos días.
El jugador, que evitó hacer más declaraciones, apuntó que en las próximas fechas tratará de agradecer las muestras de cariño recibidas y que, presumiblemente la próxima semana, ofrecerá una rueda de prensa para hacer sus primeras valoraciones después del incidente en el estadio Helmántico.
El pasado 24 de octubre, en el minuto 59 del partido, sufrió un síncope y tuvo que ser atendido de inmediato sobre el terreno de juego por los servicios médicos de los dos equipos, donde se le sometió a descargas eléctricas con el Equipo de Reanimación Cardiopulmonar.
Según explicó después el médico de la Unión Deportiva Salamanca, José Ignacio Garrido, Miguel García, «estuvo muerto durante 25 segundos», pero por suerte se le consiguió reanimar de la parada cardiorespiratoria.
El futbolista fue trasladado al Hospital salmantino, donde estuvo dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), hasta el martes, 26 de octubre. Posteriormente, fue trasladado a planta donde ha estado otros dos días, antes de recibir el alta, aunque no podrá volver a jugar al fútbol.