El Abierto de Australia vivirá este domingo una final inédita entre Novak Djokovic y Andy Murray, dos tenistas jóvenes y de contrastada calidad que, sin embargo, se han visto ensombrecidos a lo largo de su carrera por los dos grandes dominadores del deporte de la raqueta, Rafa Nadal y Roger Federer.
El número uno y el número dos del tenis mundial se plantaban en Melbourne Park por partes diferentes del cuadro y la apuesta ortodoxa les situaba en un nuevo enfrentamiento directo que hubiera sido el vigésimo tercero en el circuito ATP. De hecho, Nadal y Federer se reparten 21 de los últimos 23 trofeos del 'Grand Slam'.
Sin embargo, los pronósticos saltaron en pedazos, primero en cuartos de final, cuando un mermado Rafa Nadal cayó ante su compatriota David Ferrer, y después en semifinales, cuando Djokovic liquidó en tres sets la esperanza que tenía Federer de revalidar su corona en Australia.
De esta forma, Nadal, que venía de encadenar trofeos 'grandes' en París, Londres y Nueva York, y Federer, que sigue ostentando el récord de títulos de 'Grand Slam' con un total de 16, deberán conformarse con ver la final por televisión y esperar su siguiente oportunidad en la próxima edición de Roland Garros, que comenzará el 17 de mayo.