Valencia 3 - 0 Real Sociedad
Valencia: Guaita, Miguel, Dealbert, Ricardo Costa, Mathieu, Albelda (Topal, m.79), Banega, Joaquín (Pablo, m.61), Jonas, Mata y Soldado (Aduriz, m.61).
Real Sociedad: Bravo, Martínez (De la Bella, m.46), Demidov, Míkel, Estrada, Prieto, Aranburu (Elustondo, m.60), Markel, Griezmann, Zurutuza y Tamudo (Ifrán, m.67).
Goles: 1-0, m.17: Soldado. 2-0, m.25: Jonas. 3-0, m.37: Soldado.
Àrbitro: González González (colegio castellano-leonés). Amonestó por el Valencia a Mathieu y por la Real Sociedad a De la Bella.
El acierto del Valencia en la primera mitad doblegó a la Real Sociedad en Mestalla en un partido que fortalece al equipo local en su lucha por ser tercero y mantiene al conjunto donostiarra inmerso en su batalla por la permanencia.
La victoria se convirtió en un bálsamo para el Valencia, que compensó sus habituales lagunas en defensa con una gran efectividad de cara a puerta cuando más equilibrado estaba el partido, mientras que la Real, también floja en defensa, nunca encontró el camino del gol.
Todo fue favorable para el Valencia en la primera mitad, ya que en un encuentro sin grandes diferencias entre ambos contendientes, el equipo local se fue al descanso con un marcador de 3-0 gracias tanto a su acierto de cara a puerta como a la debilidad de la defensa donostiarra.
Los tres goles locales del primer periodo fueron de muy bella factura y dieron al Valencia una ventaja importante en el marcador ante un equipo que veía como cada llegada del rival acababa en gol a pesar de su esfuerzo para manejar la pelota criterio, sobre todo cuando el balón estaba en poder de Xavi Prieto, el mejor del primer periodo.
La fortuna tampoco ayudó al equipo donostiarra, que pudo empatar en la jugada inmediata al 1-0 y que se encontró con un castigo excesivo para lo visto en un primer tiempo en el que las defensas no estuvieron bien, pero en la que la del Valencia no tuvo el castigo que sufrió la de la Real Sociedad.
Sólo en los diez minutos finales y con un marcador muy favorable mostró el Valencia hechuras de equipo superior sobre todo a partir de una mayor presencia de Banega en el juego de un equipo, que hasta entonces había estado dirigido por el veterano centrocampista de contención David Albelda.
El Valencia mejoró en los minutos posteriores al descanso. Mostró más consistencia en su juego, dominó el centro del campo y, sobre todo, impidió que su rival tuviera posibilidades de meterse en el partido con un gol.
Pablo y Aduriz entraron por Joaquín y Soldado, mientras que Elustondo ocupó el puesto de Aranburu sin que el dibujo cambiara en ninguno de los dos equipos, al tiempo que el partido perdió intensidad.
La Real Sociedad recuperó la pelota mediado este periodo, pero le faltó profundidad ante un Valencia que tenía espacio para los contragolpes, aunque no los prodigaba. El partido había vuelto a los parámetros de la primera mitad.
Los minutos finales fueron de dominio visitante, con algunas ocasiones de gol, pero el marcador ya no se movió en un partido que acabó sin ninguna intensidad.