A sus 45 años, el entrenador de pádel argentino Tony Rodríguez ha dado con el ‘oro de Moscú', en sentido figurado. Afincado en Eivissa desde hace tres años y monitor del deporte de moda en las instalaciones de Can Coix, en Sant Antoni, este amante del deporte ha conseguido, tal y como asegura, tener la exclusividad durante cinco años con la federación rusa de la primera raqueta de pádel hecha en Eivissa gracias en buena parte a su mujer, de nacionalidad rusa. Además, implantará la primera pista de pádel portátil en suelo ruso.
«Tenemos una pista portátil que será la primera y única que existe en Rusia», indica Rodríguez, quien ha logrado un acuerdo de comercialización de la primera raqueta «diseñada y fabricada en Eivissa» con la empresa de artículos deportivos Traxon.
Esta firma «ha creado una pala exclusiva para Rusia y ha invitado a una comitiva para que visite la Isla este mes o el que viene».
Es a partir de febrero cuando el monitor con residencia en Eivissa pretende dar el salto al país ruso con el objetivo de iniciar una serie de exhibiciones para exportar este deporte y estrechar lazos con la federación deportiva de aquél país. De hecho, el argentino reconoce que esta pala será «el buque insignia de la nueva federación rusa de pádel, cuya primera delegación será la ibicenca».
La empresa Traxon, como apunta el técnico, también es la encargada de aportar la pista portátil que ha sido construida por la fábrica valenciana Padelinter. En las próximas semanas se conocerán más detalles del desembarco ibicenco en Rusia.