El presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, dijo el jueves que el escándalo de corrupción que sacude a la entidad ha provocado vergüenza y humillación al fútbol y exigió que haya cambios, eso sí, sin incluirse a si mismo cuando va camino de su quinto mandato.
En un desafiante discurso en la apertura del Congreso de la FIFA en Zúrich, en el que espera ser reelecto como presidente por quinta vez, Blatter dijo que no debe haber lugar para ningún acto de corrupción en el fútbol.
El suizo buscó distanciarse del escándalo en el que siete altos funcionarios de la FIFA fueron arrestados por acusaciones de corrupción. «No puedo controlar a todos todo el tiempo. Si la gente actúa mal va a tratar de ocultarlo», dijo el hombre que controla todo lo que pasa en la FIFA.
El dirigente sostuvo que la FIFA ha perdido la confianza y debe recuperarla, comenzando con la elección del viernes.
«Se necesita hacer más para asegurarse de que todos los involucrados en el fútbol se comporten con responsabilidad y ética», agregó.