Turquía 77 - 104 España
Turquía (18+20+18+18): Guler (2), Osman (9), Ilyasova (15), Erden (2) y Muhammed (5) -equipo inicial-, Ozmizrak (3), Hersek (7), Mahmutoglu (12), Savas (6), Korkmaz (2), Koksal (12) y Aldemir (2).
España (24+30+27+23): Pau Gasol (21), Rudy (10), Ribas (8), Mirotic (9) y Llull (9) -equipo inicial- Reyes (12), Hernangómez (11), Rodríguez (14), Claver, San Emeterio (10), Aguilar y Vives.
Árbitros: Sreten Radovic (CRO), Saso Petek (SLO) y Milos Koljensic (MNE). Savas fue eliminado por cinco personales (min. 31).
La selección española de baloncesto barrió de un plumazo cualquier duda sobre su juego y puntería al solventar con abrumadora solvencia el partido contra Turquía por 77-104, en la segunda jornada del Europeo 2015.
Seis puntos de Pau Gasol, siete de Mirotic y dos triples anotados de cuatro lanzados fue la principal diferencia del equipo español en el primer cuarto contra Turquía, con respecto al del partido del debut contra Serbia, que acabó dominando por 18-24.
El equipo español volvió a salir concentrado y trabajador en defensa, pero el acierto ofensivo estuvo acorde a lo presumible y el marcador se mantuvo siempre a favor desde el 0-5 inicial.
Pero la diferencia llegó en el segundo periodo, cuando la selección se soltó la melena y acabó con 5 de 6 triples anotados en este tiempo, corriendo contraataques, aportando todos en ataque y defendiendo con eficacia hasta sacar de quicio a los otomanos, que llegaron a ir perdiendo por 22 puntos, 28-50 (min. 17.30) y 31-53 un minuto más tarde.
Por meter triples hasta los metieron Felipe Reyes y Pau Gasol, demostrando que todos estaban más que implicados en la tarea de anotar y sumar para el equipo.
Al descanso, 38-54, y la sensación de que España, siendo fiel a sí misma, a su juego y a sus características, había superado una crisis más circunstancial que de estructura de equipo. Gasol con 11 puntos, 4 rebotes y 2 tapones fue de los destacados, pero todos sumaron, Sergio Rodríguez 7 puntos, Reyes 8, Fernando San Emeterio 8, Llull 7 y Mirotic 9.
La irrupción de Pau Ribas y San Emeterio en la rotación exterior permitió, además, dar descanso a Rudy Fernández.
En Turquía poco o casi nada, más allá de los destellos de calidad de su joven figura Cedi Osman (9 puntos) y de la aportación de Ersan Ilyasova (8). Los turcos se vieron desbordados por España y se quedaron sin recursos. Sólo su dureza en defensa y las rotaciones de Sergio Scariolo, pensando más lejos de este partido, impidieron un marcador de auténtico escándalo.
El equipo español cerró definitivamente el partido en los primeros dos minutos del tercer cuarto cuando firmó un parcial de 0-10, 38-54.
Scariolo puso en liza de nuevo al cinco inicial y los jugadores respondieron a la perfección con su cometido. La diferencia creció hasta un máximo de 29 puntos (49-78, min. 26.30), momento en el que el seleccionador turco, Ergin Ataman, decidió tirar la toalla e ir sentando a sus titulares.
El técnico español no quiso seguir haciendo sangre y también repartió minutos entre los más jóvenes. El cuarto acabó con 56-81 y con todo decidido.
El último cuarto fue absolutamente intrascendente. Tan solo reseñar que la máxima diferencia ascendió a 34 puntos (70-104, min. 38.15). España venció y convenció traspasando las dudas a Turquía.