No pudo ser el sueño del ascenso a Segunda División para el Atlètic Balears, pero aquí no se trunca la esperanza de un equipo que ha despertado de nuevo la ilusión en su hinchada. Los jugadores blanquiazules, que este domingo perdieron en Albacete con un desafortunado gol en propia puerta en el minuto 116 (2-1), fueron recibidos como auténticos héroes a su llegada a Son Sant Joan. La afición, fiel y agradecida, quiso arropar al equipo en estos momentos y, pese a la derrota, celebró su esfuerzo.
En el aeropuerto, decenas de aficionados reconocían el trabajo hecho en esta temporada. Bufandas, banderas y cánticos para un equipo que ha prometido que «el año que viene, con vuestra ayuda, volveremos a intentarlo y lo conseguiremos».