El ciclista esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) ganó este jueves la sexta etapa del Tour de Francia, disputada entre Binche y Longwy sobre 219,9 kilómetros, y además vestirá ya el maillot amarillo de líder después de que Wout van Aert (Jumbo-Visma) intentara una gesta como escapado que le dejó reventado.
La lió Pogacar en el pavés de la quinta etapa y logró 13 segundos de margen como mínimo sobre la mayoría de sus rivales. Esta vez, en un final muy clasicómano en la etapa más larga de esta ronda gala, aplastó de nuevo al resto en un esprint que picaba hacia arriba para demostrar que es el más fuerte del momento.
Tras una jornada muy rápida marcada por la lucha por la fuga y con esa aventura brutal de Van Aert –cedió 7:28 minutos en meta–, Pogacar se sitúa ya como líder de la general provisional por delante de un Neilsson Powless (EF Education-EasyPost) que no será líder por la bonificación en meta para el esloveno, que sigue imparable en el arranque de Tour.
Si bien ayer fue Primoz Roglic (Jumbo-Visma) el mayor damnificado por una caída –se dislocó el hombro y perdió unos dos minutos con su compatriota–, esta vez fueron Aleksandr Vlasov (BORA-hansgrohe) y el español Enric Mas (Movistar Team) los que pringaron. El del BORA, que se fue al suelo, más si bien perdió cinco segundos. El balear, que no llegó a caerse, se reenganchó y entró con los mejores.
Este día nos brindó otra exhibición de Wout van Aert. Pocos corredores son capaces de hacer lo que hizo, y menos vistiendo el maillot amarillo de líder. En la etapa más larga de este Tour de Francia, el belga peleó hasta meterse en la fuga del día junto a Quinn Simmons (Trek-Segafredo) y Jakob Fuglsang (Israel-Premier Tech) y terminó, obvio, por irse en solitario en un pulso de peso contra el pelotón.
Pese a que costó más de 70 kilómetros hacer la fuga del día, con ataques previos de hombres de importancia como Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma) o el mismo vigente campeón Pogacar, finalmente Van Aert logró su objetivo y no pudo ser cazado hasta 11,1 kilómetros de la meta. Ahí terminó su aventura y su liderato, pues al final no pudo seguir el ritmo del gran grupo. Pero dijo adiós al amarillo con valentía, pundonor y brindando un gran espectáculo.