Dos personas han sido imputadas por la Guardia Civil presuntos autores de un delito de caza y otros ocho de maltrato animal por envenenamiento cometidos en Mallorca.
Los hechos por los que están imputadas se remontan al pasado marzo, cuando se recibió una denuncia por el envenenamiento de dos perros en una finca del municipio de Santa Eugenia. Un animal murió y el otro quedó en estado muy grave.
Días después, ha explicado la Guardia Civil, se recibió una nueva denuncia de otra finca rústica próxima a la anterior, por la muerte de dos perros en febrero y marzo de este año, en los casos a causa de la ingestión de algún raticida o un producto químico similar.
Posteriormente, se formuló por parte de esta finca una denuncia sobre la desaparición de seis perros en los últimos cinco años.
A raíz de ello, agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA) emprendieron una investigación, incluidas dos inspecciones con el apoyo de un perro especializado en la detección de cebos envenenados.
Durante estos rastreos el equipo encontró cebos de carne envenenados, del tamaño de una pelota de golf que fueron recogidos y analizados.
En una de las fincas hallaron cebos envenenados se localizaron productos fitosanitarios descatalogados y alimento para animales, además de productos destinados al control de plagas de caracoles que aparentemente coincidía con uno de los componentes del cebo.
Uno de los imputados tiene antecedentes por hechos similares.