La falta de lluvias empieza a causar estragos en los acuíferos de Balears. En Mallorca están al 53% de su capacidad, un 5% menos de lo que se encontraban en 2014, considerado también un año seco.
Ante esta situación, la conselleria de Medi Ambient i Agricultura prevé trabajar conjuntamente con los ayuntamientos para gestionar la demanda de manera adecuada y así reducir el consumo, además de «conscienciar a la población de la necesidad del ahorro de agua», según apuntan desde el Govern.
Cabe destacar que el agua subterránea representa el 85 % del suministro hídrico de la Isla, lo que es de máxima importancia para poder abastecer a la población. De momento, ya se han evidenciado algunas dificultades de abastecimiento en municipios de la serra de Tramuntana por la falta de agua o la mala calidad de esta, a causa de la presencia de sulfatos o del estado de los embalses. «Estos hechos hacen pensar que si no llueve en los próximos meses puede haber dificultades para pasar la temporada turística», aseguran desde la conselleria.