Un total de 49 núcleos urbanos de Balears siguen sin disponer de agua corriente en pleno siglo XXI. Según la estadística de que dipone el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, en Balears sigue habiendo 2.473 viviendas que no están conectadas a la red de suministro de agua potable pese a estar en terrenos urbanos.
Los municipios de Mallorca que presentan carencias en esta materia son Banyalbufar, Deià, Campos, Capdepera, Escorca, Esporles, Llucmajor, Marratxí, Pollença y Valldemossa. Entre todos ellos suman 21 núcleos de población donde se asientan 850 viviendas con una población fija de 920 habitantes. La población afectada se multiplica en los meses de verano, ya que la mayor parte de estas zonas sin agua corriente se encuentran en suelo urbano fuera del núcleo central del municipio.
El déficit de agua corriente en zonas urbanas es especialmente llamativo en Menorca. En la Isla hay siete núcleos urbanos que se sirven de cisternas en los municipios de Alaior, Ferreries y Maó. Hay un total de 1.009 viviendas afectadas con una población fija de 943 habitantes que, como sucede en Mallorca, aumenta durante los meses de verano y los fines de semana.