El Parlament ha expresado su condena a todas las formas de violencia machista y ha recordado a las 39 víctimas en todo el Estado de este año con un acto institucional con ocasión del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las mujeres, que se celebra el 25 de noviembre.
La cámara balear ha celebrado este martes un acto de recuerdo a las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, que ha consistido en el encendido de velas, una de por cada una de las víctimas, por parte de las principales autoridades de las islas, y de diputados y portavoces parlamentarios, entre otros.
Además, el Parlament ha aprobado por unanimidad una declaración institucional en contra de la violencia de género, en la que ha expresado su rechazo a las violencias machistas y a los fundamentos de la desigualdad que la sostienen, y reconoce las diferentes forma de ejercer estas violencias y la diversidad de las personas que la padecen.
La presidenta del Parlament, Xelo Huertas, ha leído la declaración institucional en la que ha recordado que en lo que va de año en Baleares han muerto asesinadas 6 mujeres víctimas de violencia machista, la última la semana pasada, hecho por el que ha expresado la condena de la Cámara.
En el documento la cámara legislativa autonómica se compromete a implicarse de forma activa en la búsqueda y construcción de un espacio libre de violencias machistas, y a hacer visible que estas violencias no atañen solo al ámbito privado, sino que son un problema de toda la sociedad.
El documento reconoce también que las desigualdades están relacionadas con la idea de superioridad de los hombres sobre las mujeres y en la imposición de un único modelo de ser y comportarse según el género al que pertenecen.
El Parlament dará apoyo a las mujeres que han padecido o sufren violencias machistas y exigirá a las instituciones que aseguren la protección y la ayuda necesaria a las mujeres afectadas y sus hijos, mediante la dotación de recursos suficientes y de una coordinación efectiva.
La cámara trabajará para que las generaciones futuras se construyan sobre el respeto y trato igualitario y no discriminatoria por razones de sexo, orientación sexual o identidad de género.
Además, denunciará las situaciones de desigualdad y violencia sobre las que tienen conocimiento y finalmente se compromete a construir una ciudadanía respetuosa con la diversidad, libre de cualquier tipo de violencia machista, abierta e inclusiva desde una actitud práctica.