La Comunidad Autónoma de las Islas Baleares (CAIB) cerró 2016 con una cifra de 28.982 trabajadores, casi 1.800 más que en 2010, según datos que publica en su web el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
En los últimos años, desde 2010, el mejor año de empleo de la administración autonómica balear fue 2012 con 29.425 trabajos, seguido de 2016 con 443 trabajadores menos, hasta los 28.982.
Si se compara 2016 con 2010, con 27.202 empleos, Baleares ha ganado en esos seis años 1.780 trabajadores en la administración autonómica.
Tras 2012, el mejor año, el empleo público cayó en 2013, 2014 y 2015, aunque siempre se mantuvo por encima de los 27.000.
Las administraciones autonómicas españolas necesitan 53.727 empleos para recuperar la plantilla global que alcanzaron en 2010, el año en el que empezó a notarse una crisis de la que aún no se han recuperado, especialmente en los dos ámbitos que requieren más personal: sanidad y educación.
El Ministerio de Hacienda y Función Pública ofrece en su web información sobre cuál ha sido la evolución de los efectivos de las comunidades por áreas de actividad. El trazado del Departamento que dirige Cristóbal Montoro acaba justo el año pasado, cuando ya se produce una leve recuperación.
Si se sigue ese trazado desde 2010, antes de que la recesión cayera a plomo en España, cinco comunidades han conseguido superar la crisis en lo que a volumen de empleo se refiere. Aragón, Cataluña, Baleares, La Rioja y Euskadi tienen más plantilla seis años después.
Sus mejoras, sin embargo, no se transmiten al global de las autonomías.
La tabla de Hacienda precisa que el año pasado trabajaron en las administraciones autonómicas un total de 1.294.765, mientras que en 2010 lo hacían 1.348.492. Faltan aún 53.727 empleados.
Al menos, en 2016 se produce el primer ascenso en cuatro ejercicios (unos 10.700 trabajadores más que el anterior), desde el máximo histórico de 2012.
Los efectos de la gestión de la crisis, entre ellos el bloqueo de la tasa de reposición, se padecieron en las administraciones autonómicas con especial intensidad entre ese año y 2015, un descenso (muy llamativo de 2012 a 2013, de unos 45.000 empleos) que costará revertir.
Consciente de la situación, el Ministerio de Montoro ha avanzado a los sindicatos que está ultimando una oferta de empleo público que incluirá una tasa de reposición del cien por cien en las áreas más dañadas: sanidad, educación y justicia.