La Conselleria de Salut ha iniciado el procedimiento administrativo para contratar la redacción del proyecto y la dirección de las obras de demolición de parte del antiguo hospital Son Dureta, un derribo que deberá autorizar la Tesorería General de la Seguridad Social, titular de la instalación.
El Consell de Govern ha sido informado del comienzo de este proceso, para el que se habilitará una partida de 219.025 euros a cargo de los presupuestos de este y los tres próximos años, según ha informado la portavoz del ejecutivo, Pilar Costa.
En concreto, se derribará el edificio que albergaba consultas externas y el área maternoinfantil, así como el inmueble de las cocinas y los vestuarios.
Una vez se obtenga el permiso de la Seguridad Social, se prevé un plazo de 28 meses para la redacción del proyecto, la demolición y la habilitación del solar en el que se construirá un edificio de 35.000 metros.
Esta actuación, ha recordado Costa, forma parte del proyecto para convertir el viejo Son Dureta, cerrado en 2010, en un nuevo centro destinado a pacientes con enfermedades crónicas y dependientes que contará con una superficie total de 76.000 metros cuadrados con 450 camas y 120 plazas residenciales.