La vicepresidenta del Govern y consellera de Turismo, Bel Busquets, ha anunciado que tras seis meses de vigencia de la Ley que regula el alquiler turístico se han dado de baja «574 viviendas que suman un total de 3.620 plazas que ya no irán a bolsa sino que desaparecen».
Busquets se ha expresado así durante su comparecencia en la Comisión de Turismo que ha tenido lugar este jueves en el Parlament, tanto a petición suya como del PP. En ella, la vicepresidenta ha hecho balance de la actividad de su departamento.
Según ha remarcado, la legislación debe cumplirse «por seguridad jurídica» y también ha dicho que «solo una regulación clara puede permitir saber de lo que se habla y evitar que este volumen fuera de control aumente y eso es lo que hemos hecho con la ley».
«La aprobación de la ley que regula el alquiler turístico establece, por primera vez en la historia de estas islas, un techo real de plazas turísticas, constituido por las plazas existentes más la bolsa de plazas disponible», ha señalado.
Regular el 'todo incluido'
A su vez, Busquets ha asegurado que mantiene su compromiso de regular el 'todo incluido' y que están trabajando actualmente en ello porque «su intención es poder presentar la propuesta durante este primer semestre de 2018».
Según ha dicho, el 'todo incluido' es una actividad que se debe «hacer compatible con la oferta complementaria», que «no debe quitar valor ni calidad producto turístico» y que «no debe alterar la calidad de vida de los residentes de la zona donde se lleva a cabo».
«Estamos inmersos en un proceso de trabajo interno pero también buscaremos el consenso con los diferentes agentes sociales y económicos implicados, así como con los consells y ayuntamientos y los grupos políticos», ha señalado.
Por otro lado, Busquets ha recordado el Plan de Acción 2018 de la Agencia de Turismo de Baleares (ATB). En él, se establecen, entre otros objetivos, consolidar la temporada de invierno para un mayor equilibrio de la actividad turística. «Se debe promover el 'Better in Wintter' para combatir la estacionalidad», ha remarcado.
Entre otros objetivos, también se incluyen contribuir a un mayor reparto sectorial y territorial de los ingresos derivados del turismo, conocer mejor la demanda y el posicionamiento de Baleares en los mercados exteriores, mejorar la calidad turística y la colaboración dentro del sector público, y entre el sector público y el sector privado.
Además, tal como ha dicho la vicepresidenta, se quiere conseguir aumentar el gasto medio por turista y los días de estancias.