Una decena de leyes impulsadas por el Govern que preside Francina Armengol coinciden con las prioridades que el recién nombrado presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quiere para un mandato que será más breve de lo habitual aunque, en cualquier caso, se prolongará más allá de las elecciones autonómicas de 2019 salvo que su inestabilidad parlamentaria lo hiciera inviable.
La «universalización de la sanidad pública», que es uno de los compromisos que formuló Sánchez y que se concretaría con la derogación de un decreto que retiró algunas prestaciones, tiene un precedente en las Islas: la llamada ‘devolución de tarjetas sanitarias', que fue uno de los primeros acuerdos del Govern de Armengol. Otras leyes que están en cartera ya existen en Balears, como la de la Memoria Democrática o la Ley de Fosas. Igualmente están en el punto de mira del Ejecutivo estatal la aprobación de una Renta Social Garantizada, que también existe en las Islas. Otra es la recién aprobada Ley de Vivienda y también está en el punto de mira una Ley de Igualdad y otras propuestas que tienen que ver con la limitación de vehículos o plásticos.
Hace tiempo que los partidos que forman la mayoría de Govern en las Isla se refieren abiertamente de Balears como un laboratorio de la izquierda. Es cierto que la moción de censura ha adelantado los tiempos pero lo que había quedado claro era que el PSOE sólo podría gobernar con un acuerdo que incluyera a Podemos y otras formaciones de la izquierda, como sucede en Balears desde 2015.
Cargos ajenos al Govern
Francina Armengol siempre ha defendido el acuerdo del PSOE con todos los partidos, incluso con los independentistas. Y el pasado viernes volvió a defender esta posición antes varios medios de comunicación estatales después de reunirse con Sánchez. En esta situación, y pese a sus dudas iniciales, la posición de Armengol ha quedado fortalecida. Otras cosa es, según explican a este diario desde el PSIB, que la presidenta o cualquier otro conseller de su Ejecutivo vayan a dar el salto a Madrid, es una hipótesis que no se plantea.
La prioridad de Armengol son las elecciones de 2019 y su objetivo es gobernar «cuatro años más» reeditando la actual mayoría. Si hay cargos de Balears que se incorporan a la Administración, no serán quienes forman parte del entorno de la presidenta, explican.
La diputada Sofía Hernanz, una apuesta segura en todas las quinielas de Sánchez
La diputada Sofía Hernanz forma parte del núcleo más próximo al presidente del Gobierno y se da por seguro en fuentes del partido que ocupará algún cargo. Lo que ocurre es que Hernanz es diputada y, en principio, el PSOE quiere evitar duplicidades. En la misma situación está el diputado Pere Joan Pons. Incumplieron la disciplina de voto y se negaron a abstenerse en la investidura de Rajoy. El PSIB da pocas pistas sobre futuros nombramientos aunque ha dejado entrever que su preferencia es poder influir en la toma de decisiones. Por norma general, ser echaría mano del grupo parlamentario antes que de las diferentes consellerias.