Cada poco tiempo apela a la solidaridad de los baleares para mantener las reservas de sangre o leche materna que el sistema necesita. Ismael Gutiérrez (Palma, 1985) lleva dos años al frente del Banc de Sang.
¿Cuál es el nivel de donaciones a día de hoy (la entrevista se realizó el pasado 8 de agosto)?
—Hoy estamos a 713 bolsas y lo óptimo son 700 así que hoy, puntualmente, estamos tranquilos. El problema del verano es que es una montaña rusa y puede cambiar en cuestión de días. En esta época la gente deja de donar por tres motivos: ya sea porque hace calor y no apetece, porque por la estructura productiva mucha gente trabaja y no tiene tiempo y por otro lado porque muchos se van de vacaciones. Sin embargo recordamos que el enfermo de leucemia que necesitará de cincuenta a trescientas transfusiones para superar su enfermedad no se va de vacaciones o que un parto complicado que necesita veinte bolsas puede pasar mañana.
¿Ha bajado el número de donantes?
—Estamos cubriendo la demanda. Si un año el sistema sanitario necesita 35 mil bolsas, nosotros utilizaremos nuestros medios para cubrir las 35 mil bolsas. En 2018 respecto al año anterior hubo un bajón pero las necesidades del año no fueron tan intensas como en 2017. Si sacamos demasiada sangre aparece otro problema que es la caducidad y no podemos dejar que una bolsa caduque. Por suerte o por desgracia hace muchos años que no nos caducan pero el marzo pasado tuvimos una situación de excedencia.
¿Cuánto tarda en caducarse una bolsa de sangre?
—De las bolsas sacamos tres elementos: los glóbulos rojos que duran hasta 42 días, el plasma que puede congelarse y durar hasta tres años y las plaquetas que son el gran problema porque en temperatura ambiente y movimiento continuo sólo duran cinco días. Así que si hay excedente de plaquetas es difícil que no caduquen y es un drama para nosotros. Por eso hay que ajustarse a la demanda hospitalaria. Digo esto porque hay que evitar el mito de que en agosto hay más demanda, lo que pasa es que se dona menos.
¿Cuáles son los principales falsos mitos relacionados con las donaciones?
—Hay muchos. Como que se negocia con la sangre, cosa que está prohibida porque si la remuneras generas un incentivo para mentir en el cuestionario médico. Nosotros nos financiamos de manera inversa, cuanta más sangre utiliza un hospital más participa del presupuesto de la fundación, así se pretende consumir cuanta menos sangre posible. Otros mitos son que no se puede donar porque se han hecho un tatuaje, cuando sólo hace falta dejar pasar cuatro meses o que los turistas se llevan nuestra sangre, y no, Son Espases tiene un repunte pero muchos hospitales cierran quirófanos. Lo importante es que la gente que tenga dudas llame y se informe.
¿Qué hay sobre el banco de leche materna?
—El doctor Antoni Gayá impulsó el de Balears, el primero de España. Permite guardar la leche de excedentes de madres para los bebés que la necesiten. El año pasado una sola madre a la que ayudamos a gestionarse donó el 50% de la leche que se necesitó en 2018. La leche materna dura un año antes de caducar, o tres meses sino está en nuestras instalaciones.
¿Cómo pueden hacerse donantes de médula ósea?
—Aquí hacemos el primer paso que es dar dos tubos de sangre que analizan en Son Espases y envían a una base de datos estatal. Una vez allí te pueden llamar en cualquier momento si eres compatible. Hay que dejar claro que su uso es internacional así que tu donación puede ir a cualquier lugar el mundo. A veces se ven movilizaciones de una localidad para una persona pero no hay nadie compatible... Lo que el sistema no se puede permitir es que al llamar al donante se niegue.