La Conselleria de Turisme ingresó poco más de la mitad de la cantidad prevista en concepto de multas el pasado ejercicio. En concreto, recaudó 1.036.456 millones, lo que representa cerca del 60 % de los 1,79 millones presupuestados en las cuentas de la Comunitat de 2019. Así se desprende de la respuesta que el conseller de Turisme i Treball, Iago Negueruela, contestó por escrito a la solicitud de la diputada del PP Salomé Cabrera.
Cabe recordar que el pasado año el presupuesto en ingresos por sanciones turística casi se duplicó en relación al de 2018 ya que el ejercicio anterior fue el primero en que se cumplió en su integridad la ley de alquiler turístico. Incluso en su momento se estimó que la previsión de recaudar 1,79 millones en multas podría superarse, algo que finalmente no fue así a tenor de los resultados.
Sin embargo, el desajuste registrado en 2019 podría paliarse a lo largo de este año. Desde la Conselleria de Turisme i Treball explicaron que la planificación del presupuesto va más allá del calendario que tenga un expediente en concreto, de modo que es muy difícil prever cuándo se va a cerrar un expediente. A esta dinámica de funcionamiento es a la que se atribuye desde la Conselleria que la sanción correspondiente a algunos expedientes se pueda ingresar en ejercicios fiscales posteriores a su inicio.
Por otro lado, desde el departamento que dirige Negueruela recordaron que existen expedientes que están judicializados, por lo que hasta que no se resuelvan no suponen el ingreso de las multas en las arcas públicas. En este sentido, cabe recordar que una de las sanciones más elevadas que se impusieron, a la plataforma Airbnb, todavía no se ha resuelto debido a los recursos interpuestos por la compañía.
Nueva previsión
De cara a este año, las previsiones de ingresos en multas de la Conselleria de Turisme se incrementan de forma considerable a raíz de la entrada en vigor del nuevo decreto ley contra el turismo de borrachera. Los presupuestos de este departamento prevén recaudar 2,5 millones en sanciones. Esta cifra supone más del doble de lo que finalmente se ingresó el pasado año, poco más de un millón.
El régimen sancionar del nuevo decreto ley, en vigor desde el pasado viernes, contempla multas de hasta 600.000 euros para las faltas muy graves. En caso de falta leve, la cuantía mínima es de 1.000 euros.
En el caso del alquiler turístico, cabe recordar que las sanciones oscilan entre los 20.000 y los 40.000 euros para los propietarios que incumplan la ley. En el caso de las plataformas que no se adecuen a la normativa, la cuantía puede ascender hasta los 400.000 euros.
Hasta el momento, muchas de las multas que se han impuesto por incumplir la ley de alquiler turístico se han recurrido, lo que conlleva un retraso en los ingresos previstos por este motivo en las arcas públicas.
A la espera de incorporar los nuevos inspectores
El conseller Iago Negueruela anunció en su comparecencia parlamentaria para dar cuenta del presupuesto de su Conselleria para este año que se iban a incorporar seis nuevos inspectores en Turisme. Sin embargo, aún no se sabe cuándo estarán en activo, pese a que se trabaja en esta cuestión, según respondió el conseller a la diputada del PP Salomé Cabrera, también por escrito.