La Fundación ONCE del Perro Guía está de aniversario. Cumple 30 años, tres décadas facilitando más de 3.200 canes a personas ciegas o con discapacidad visual grave a fin de que mejore su autonomía, su seguridad y los desplazamientos. En Baleares, actualmente hay 12 perros guía distribuidos entre las Islas (ocho en Mallorca, tres en Ibiza y uno en Menorca), y más de 1.000 recorriendo las calles del país.
«Los perros guía ya existían antes de la Fundación, pero teníamos que buscarlos a Estados Unidos. Por ello, considero que la creación del Perro Guía fue un logro muy importante del que nos sentimos muy orgullosos», destaca la presidenta de la ONCE en Baleares, Mari Carmen Soler.
Los otros ojos
«Los perros guías son nuestros ojos. Nos acompaña en los recorridos y se guían a través de instrucciones. Nos dirigen y evitan los obstáculos». Así define Soler a este animal, que tanto ha facilitado la autonomía a las personas ciegas o con alguna discapacidad visual.
La escuela del Perro Guía se encuentra en Madrid. Adopta los modelos europeos y norteamericanos. Entre los servicios, dan cabida a la crianza, alojamiento y cuidado del animal, así como la instrucción. «Estos perros empiezan a adiestrarse al año de vida. Son entregados a familias educadoras para que lleven a cabo las directrices necesarias. Se los llevan por la calle, en transporte público y a trabajar para acostumbrarlos», detalla Soler. El adiestramiento de dura entre ocho meses y un año. Las razas más utilizadas son el labrador retriever, golden retriever, pastor alemán y el flat coated retriever.
Para solicitar un perro guía, uno de los requisitos es demostrar la mayoría de edad, tener los recursos económicos necesarios para mantener al animal y pertenecer a la ONCE, entre otros procesos burocráticos.
En la ONCE Baleares hay actualmente 1.250 personas afiliadas, de las cuales un 20 % presenta una visión funcional baja. La entidad tiene como principal objetivo la inclusión de las personas ciegas en la sociedad.