La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 44 años, de origen bangladesí, por presuntamente traer ilegalmente a compatriotas a Mallorca para explotarlos laboralmente, pagando entre uno y dos euros la hora.
Según ha informado la Jefatura Superior de Policía Nacional en Baleares, al hombre se le imputan delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, favorecimiento a la inmigración irregular y falsedad documental, al tener trabajando en sus negocios a cuatro ciudadanos extranjeros sin permiso alguno.
Presuntamente, el detenido aprovechaba los viajes a su país de origen para captar a compatriotas suyos, a los que ofrecía un traslado para trabajar en España.
Supuestamente, les prometía regularizar su situación administrativa en Europa y buenas condiciones laborales.
Según la Policía, una vez en España, las víctimas se encontraban engañadas: no se regularizaba su situación administrativa y las condiciones de trabajo eran pésimas -llegando a cobrar entre uno y dos euros las hora trabajada, o incluso gratis a cambio de alojamiento-.
Los investigadores apuntan a que presunto autor les ofrecía empadronarles en una vivienda para justificar que residían allí, tras tres años en España, y así poder conseguir arraigo social y reagrupación familiar.
Una vez que la Policía Nacional tuvo conocimiento de los hechos, comenzó una serie de gestiones de investigación con las que comprobaron que el sospechoso regentaba hasta seis negocios en Palma, y sólo constaban oficialmente cinco trabajadores, algo inviable para llevar dichos negocios.
En el momento de las investigaciones se detectaron cuatro trabajadores en situación irregular, por lo que se procedió a la detención del responsable el pasado miércoles.