La presidenta del Govern, Francina Armengol, pedirá al Gobierno de Pedro Sánchez que le permita adelantar el toque de queda de las 22.00 a las 20.00 horas en Mallorca y en Ibiza. El Govern no tiene competencias para adelantar el horario por lo que Armengol se suma a la petición realizada por diversos territorios gobernados por el PP para que sean las comunidades quienes decidan la hora a la que los ciudadanos deben estar en casa de manera obligatoria. Si el Gobierno acepta, deberá modificarse el último decreto del estado de alarma que se aprobó en octubre.
La petición se formulará mañana en el Consejo Interterritorial de Salud. Comunidades gobernadas por el PP ya lo han pedido e incluso Castilla-León ha decidido aplicarlo sin esperar a la autorización del Gobierno.
Dos del PSOE
La presidenta se ha sumado a estas peticiones, junto con otra comunidad socialista, Castilla-La Mancha, así que la consellera de Salut, Patricia Gómez, pedirá mañana este adelanto.
«Soy partidaria que las comunidades autónomas dispongan de to- das las herramientas a su alcance para gestionar la crisis, y si tuviésemos la opción de avanzar el toque de queda lo tiraríamos adelante», señaló la presidenta del Govern. Recordó que ya planteó esta posibilidad al Gobierno antes de las Navidades, pero el ministro descartó esta opción ya que se requería la modificación del decreto ley de estado de alarma.
«Por este motivo, decidimos en Mallorca avanzar el cierre de la actividad comercial a las 20.00 horas y recomendamos a los ciudadanos que estuviesen en casa a esa hora», señaló. La presidenta lleva semanas pidiendo a los ciudadanos de las Islas que, en la medida de sus posibilidades, estén a las ocho de la tarde en casa.
La portavoz del Govern, Pilar Costa, incidió en esta petición de la presidenta y reclamó a los ciudadanos de Baleares que solo salgan para trabajar, ir a cole y hacer las compras necesarias. Señaló además que, con la hostelería cerrada, ya hay pocas actividades que puedan hacerse entre las 20.00 y las 22.00 horas,
Prolongar las restricciones
La consellera explicó que el Govern no tiene previsto flexibilizar las restricciones aprobadas para la hostelería y el comercio. Seguirán vigen- tes como mínimo hasta el 30 de enero, pero es muy probable que se extiendan, a la vista de la incidencia de los contagios en las islas en los últimos 14 días, con casi 1.400 casos por cada 100.000 habitantes en Ibiza y 575 en Mallorca. En Menorca, la cifra ya ha subido a 471 y en Formentera está en 355.
«El Govern no piensa ahora en flexibilizar las medidas, sino en quitar presión a los hospitales», señaló la portavoz del Ejecutivo. Costa explicó que sería «prematuro» plantear una suavización de las restricciones mientras no mejore la situación epidemiológica en las Islas.
Lo que sí ha descartado el Govern por ahora es que se vaya a acordar un cierre preventivo de Mallorca y Menorca para que no entren los residentes de Ibiza, algo que sí se ha hecho en Formentera, que ha quedado cerrada para protegerse de los contagios de la isla vecina.
La cepa británica, tras el aumento de casos en Ibiza
La portavoz del Govern, Pilar Costa, señaló ayer que una de las razones que explican el alarmante aumento de casos en Ibiza es la cepa británica. La isla ha pasado en menos de un mes de una incidencia a 14 días inferior a 100 casos por 100.000 habitantes a presentar un acumulado de 1.394 casos.