Salut ya trabaja en la reanudación de la actividad hospitalaria que tuvo que suspenderse o reprogramarse ante el aumento de la presión asistencial por COVID-19. Los hospitales públicos de las Islas se vieron obligados a activar sus respectivos planes de contingencia a mediados de julio, cuando los nuevos contagios alcanzaron récords desde el inicio de la pandemia y la presión asistencia comenzó a aumentar de forma considerable.
La necesidad de contar con más camas –en planta y, sobre todo, en UCI–, así como con personal sanitario disponible, propició que los centros hospitalarios suspendieran las operaciones programadas que requerían ingreso.
Desde hace poco más de un mes prácticamente solo se lleva a cabo actividad quirúrgica urgente, preferente y oncológica. También se han reprogramado consultas externas en algunos centros, si bien el IB-Salut indicaron que en esta ocasión este servicio se ha visto menos afectado que en las olas anteriores.
Cambio de tendencia
Hace ya poco más de una semana que la presión asistencial desciende día tras día y la consellera de Salut, Patricia Gómez, ya ha hablado de «cambio de tendencia», especialmente en lo que a ingresos en planta se refiere. En los últimos dos días se ha reducido de forma importante el número de pacientes hospitalizados en planta. En la última semana, la cifra de ingresados en la cama de un hospital ha pasado de 291 a 240; mientras que los enfermos de UCI se han reducido de 92 a 77.
El pico de ingresos críticos se alcanzó el 13 de agosto, con 92 enfermos. Sin embargo, los planes de contingencia de los hospitales se activaron mucho antes, coincidiendo con el pico de contagios. Ya entonces se pronosticó que el máximo de pacientes ingresados se alcanzaría a mediados de agosto. En esta última semana, los ingresos hospitalarios se han reducido.
Ante este descenso, el IB-Salut prevé cerrar la próxima semana el plan de desescalada de los hospitales. En los últimos días ya se han producido reuniones para abordar estar cuestión, que se concretará en nuevos encuentros.
Listas de espera
Esta situación ha afectado a las personas que esperaban tanto una primera visita con el especialista como para una intervención quirúrgica en el mes de julio. Las listas de espera aumentaron ligeramente respecto al mes precedente, si bien el mayor impacto se reflejará en la actualización de estas listas del mes de agosto, que no se publican hasta que no finalice el mes.
Hasta 54.081 ciudadanos de las Islas esperaban una primera visita con el especialista en el mes de julio, un 34,2 % más que en el mismo período del año pasado, cuando eran 40.300. La cifra también se ha incrementado respecto a junio, ya que eran 51.914 las personas que esperaban una primera consulta. De hecho, se trata del número más elevado de este año. Desde el IB-Salut ya explicaron que este incremento se debe al aumento de la actividad presencial de Atención Primaria, que ha generado un mayor número de derivaciones a especialistas.
Sin embargo, el tiempo medio de demora en julio se redujo un 29,5 % respecto a 2019. En julio de este año eran 46 días, frente a los poco más de dos meses que en 2020. En comparación con junio, el tiempo medio de espera se ha incrementado en seis días.
En cuanto a los datos de lista de espera quirúrgica, el balance es más positivo. En julio había 12.975 pacientes pendientes de una operación, un 8,4 % más que hace un año. Además, la cifra ha variado muy poco respecto a los 12.856 que esperaban para ser operados en junio. El tiempo medio de demora también se redujo ligeramente respecto a un año antes, al pasar de los 139,4 días (4,6 meses) a los 126,7 días (4,2 meses).