Piratear los partidos de fútbol si eres dueño de un bar puede salir caro. Si no que se lo pregunten al propietario de un establecimiento ubicado en la zona de la Plaza Progreso de Palma de Mallorca, que esta semana ha sido condenado a seis meses de prisión y al pago de una multa de 1.800 euros. Además deberá indemnizar a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) en 825,39 euros por los perjuicios ocasionados.
El hombre no entrará en prisión si no vuelve a delinquir en los dos próximos años tras el acuerdo alcanzado por su abogado, Iván García López, con el representante de la Fiscalía antes de la celebración de la vista, que tuvo lugar en el juzgado de lo Penal número 5 de Vía Alemania. El procesado, que admitió los hechos ante la jueza, ofreció a los clientes de su local poder disfrutar de encuentros de Primera y Segunda División, la Copa del Rey y la Champions League sin darse de alta a ninguna plataforma televisiva desde finales de 2018 y hasta el 5 de marzo de 2019.
El empresario conectó a los televisores del bar un decodificador de la marca Arris para poder sintonizar el canal LaLigaTV Bar sin tener que abonar mensualidad alguna. Una operación de la Policía Nacional detectó en Mallorca más de un centenar de establecimientos con la señal del fútbol pirateada. Los más de 150 agentes desplegados incautaron distintos decodificadores en los locales.