La venta de test de antígenos se ha disparado estos días en las farmacias de Baleares, ya que muchas personas pretenden comprobar que no están contagiados de COVID-19 antes de acudir a las comidas y cenas de Navidad. Ante este escenario, cabe preguntarse si son fiables al cien por cien estas pruebas de diagnóstico y si un negativo garantiza no estar contagiado. El especialista en Salud Pública y Medicina Preventiva, Joan Carles March, responde que «los test de antígenos no tienen la misma especificidad y sensibilidad que las PCR. Los test de antígenos pueden dar falsos negativos y falsos positivos». En este sentido, argumenta «el test de antígenos es un aspecto complementario, una barrera más de protección, como la mascarilla, la ventilación, la distancia social o el certificado COVID». Además, considera que «deberían ser más baratos, e incluso, regalarlos como una manera más para ayudar al control de la pandemia».
El especialista en Salud Pública y Medicina Preventiva insiste en que se debe tener claro que «un negativo en el momento del test sólo implica que o no hay virus justo en ese momento o que la carga viral, de estar la persona contagiada, es baja. Se presupone no contagiosidad si hay poco virus, pero podríamos transmitirlo incluso un día después si esta carga viral sube, en el caso de tener COVID no detectada». Por tanto, «si sale positivo, es casi seguro positivo, y más, si se tienen síntomas. Si se tienen síntomas y se da negativo, es preferible que lo confirmes con una PCR». En este punto, argumenta que es necesario confirmar los test de antígenos con una PCR «porque, principalmente, el test detecta cargas virales altas y si se está al inicio de la infección por COVID; en el período de incubación puede no detectar la carga viral». Otro aspecto fundamental es que se «tarda cuatro días en dar positivo, porque en los cuatro o cinco primeros días de incubación no hay carga viral suficiente para que los test den positivo». También es muy importante tener en cuenta cómo hacemos el test, puesto que puede influir en el resultado.
¿Cómo hacer un test de antígenos?
March sostiene que «hay que seguir las instrucciones del test de antígenos de farmacia con detenimiento y tener mucha higiene para no contaminar el kit. En el caso de dar positivo, se debe comunicar al centro sanitario y aislarse, además de decírselo a los contactos estrechos. Estas pruebas sólo tienen sentido si evitan cadenas de transmisión», asegura. En este orden de cosas, precisa que en la caja hay hisopos (palitos) para introducir en la nariz; la tarjeta que da el resultado, envuelta en un sobre protector; tubos y líquidos reactivos a echar en su interior.
El primer paso para hacer un test de antígenos de farmacia en casa es preparar el reactivo del antígeno. El segundo, tomar la muestra de antígeno en la nariz. Para ello, se debe abrir el envoltorio del hisopo o varilla, que se tendrá que introducir en la nariz, con cuidado de no tocar la punta algodonosa que se encargará de tomar la muestra; se debe introducir unos dos centímetros en ambas fosas nasales y darle tres o cuatro vueltas tocando las paredes del orificio nasal con la punta de la varilla. La operación llevará de 10 a 15 segundos por fosa. El tercer paso es poner tres gotas de la mezcla en la ‘S' de la tarjeta. El cuarto, y último, se produce a los 20 minutos, cuando la tarjeta mostrará el resultado del antígeno.
«Sabemos que el test de antígenos es un método para utilizar esta Navidades para disminuir el número de contagios en una comida o cena. Para ello, es necesario saber que el que nos salga negativo nos puede hacer pensar que estamos bien y no siempre es así porque en este caso hay falsos negativos. Ello puede ser porque haya poco virus aún. Por tanto, no tengamos la seguridad absoluta de que con un test negativo ya tenemos todo resuelto. Es necesario no tener la falsa seguridad de que está todo bajo control porque es una medida más, no la medida», concluye el especialista en Salud Pública y Medicina Preventiva.